Viernes 27:
Descenso barranco del Formiga y rescate en helicóptero
Nada más comer salimos de Zaragoza rumbo al Pirineo las secretarias Mel (la saltadora), Alba (la maquina) y Noelia (la monitora) con un plan de actividades apretado y exigente.
Para empezar esa misma tarde tenemos como destino el descenso del barranco de Formiga en "sesión de tarde" que es la única manera que conozco para hacerlo en estas fechas sin aglomeraciones, a pesar del riesgo de tener que pasar noche en el barranco ante cualquier imprevisto.
Impresionante ver el aparato en vuelo estático entre las paredes
Llegamos al aparcamiento cuando los últimos se marchaban, el día empieza a acortar, nos damos prisa en prepararnos y comenzamos la aproximación. A lo que llegamos a la altura de la cueva la Polvorosa oímos voces en el río y vemos a un grupo de franceses accidentados, a uno de ellos se le había roto la pierna en una caída.
Aparece el helicóptero de la Guardia Civil sobrevolando el cauce, les indicamos donde se encuentra el herido y se marchan. Yo suponía que dejarían a los guardias en algún punto y bajarían a buscarlos hasta colocar al herido en un lugar donde el helicóptero pudiera acceder.
Pasamanos de aproximación
Seguimos la aproximación por cornisas y en ese momento volvemos a oír al helicóptero que recorre el barranco a muy baja altura, desde donde estamos tenemos un mirador sobre la escena del rescate de palco.
Fue un error por nuestra parte quedarnos observando al helicóptero en vuelo estático super encajonado tan de cerca, el piloto no nos veia, cualquier maniobra inesperada nos hubiera puesto en el giro de las aspas. En ese momento no lo piensas, te quedas mirando como embobado y hasta que el piloto nos hizo un gesto como diciendo, ¡que cojones hacéis allí¡, no nos percatamos del riesgo que corríamos.
El rescate fue rápido, bajo un guardia con la grúa, recogió al herido y les subieron a los dos como podréis ver en el vídeo que sigue.
Paso por un puente de roca
Tras perder más de media hora completamos la aproximación con el pasamanos de sirga y un pequeño rapel en seco, ahora vamos con tiempo mucho más ajustado, nos damos prisa poniendo neoprenos.
No nos preocupamos demasiado, avanzamos sin pausa pero disfrutando del barranco. Entre, gritos, saltos, toboganes y risas nos sorprendimos por lo pronto que llegamos al final.
Mel en uno de los rapeles
Estábamos en el coche a las 9 de la noche, completamente solos, aun nos da tiempo a tomarnos nuestra cerveza con patatas antes de proseguir el viaje hasta mi apartamento en Campo que sera el "campo base" en este fin de semana.
El equipo completo al final del barranco
Reseña para el descenso del Formiga:
Vídeo del rescate en helicóptero y posterior descenso del barranco:
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Más fotos:
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