CRÓNICAS MONTAÑERAS: Hoces del Río Martín

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domingo, 15 de diciembre de 2019

Hoces del Río Martín

Domingo 20 de Octubre:

Hoces del Río Martín

Ruta senderista de Alcaine a Obón. Parque Cultural del Río Martín

Alcaine - Cuesta de San Ramón - La Coquinera - Barranco del Regallo - Mirador de Obón - Abrigo de la Cañada de Marco - Alcaine

Con María (la anfibia).

Pasarelas para evitar el agua

He quedado con María para andar pero en el Pirineo no dan buen tiempo, así que pasamos directamente al plan "B" visitando lo que para nosotros son zonas "inexploradas.
El río Martín lo tenía en la mente, es una zona bonita y bastante concurrida, busqué reseñas en Internet y marchamos para allá.

La torre de la iglesia de Alcaine está torcida

Desde Zaragoza son cien kilómetros y poco más de una hora viajando, estacionamos en un aparcamiento habilitado a la entrada de Alcaine. Las calles estrechas, cuestas y nada de espacio para dar la vuelta y aparcar, hacen poco aconsejable entrar en coche.
Deambulamos por el pueblo desierto en busca de un bar sin esperanzas de lograr tomar un café. Casualmente nos topamos con un lugareño que para nuestro gozo confirma que hay bar abierto.

Arriba Alcaine con la cuesta de San Ramón

Tomamos el café mientras la pareja que lo regenta ensalza las bondades de la zona, nos atendieron tan bien que una vez finalizada la excursión regresamos a degustar unos huevos fritos "por su sitio".
Tal vez no sean las fechas más idóneas, se ve todo muy seco y el río baja escaso de agua, posiblemente en primavera resalte más la belleza del entorno.

Cielo nuboso y agradable temperatura

Técnicamente es una ruta de ida y vuelta que hemos preferido "complicar" retornando en lo posible por el fondo del cañón en vez de por el cómodo sendero. Los escasos y cortos tramos de pasarelas metálicas y sirgas no presentan dificultad, la mayor parte están en el Barranco Regallo que no es obligatorio visitar.

Paso con sirgas

Sin llegar a Obón damos la vuelta en el mirador desde donde se observa el pueblo, lo que falta es poco y no tiene especial interés, a no ser que dispongamos de un segundo vehículo. De vuelta intentamos ir por el fondo del barranco dándole un toque de "aventura", el camino no siempre es claro siendo necesario cruzar el río varias veces.
Como apenas baja agua logramos, haciendo "malabarismos" y participando en la "rifa" de un "baño" no deseado, realizar todos los cruces sin descalzar.

Estrecha cornisa

Aprovechamos para visitar el Abrigo de la Cañada de Marco donde observamos pinturas prehistóricas protegidas tras unas rejas. Remontamos la cuesta de San Ramón para finalizar la ruta en el coche.
Volvemos al bar del pueblo a por los huevos fritos "de rigor" para celebrar el éxito de la "expedición. Viaje a Zaragoza sin incidentes completando una estupenda jornada montañera.