Sábado 21:
Barranco del Cebollar. Salto del Carpín
A las 9 de la mañana muuyyyyy........ relajados salimos de Zaragoza Nacho ( el patillas) y yo dirección a Bujaruelo para descender el barranco del Cebollar. Paramos en Sabiñanigo a comprar desayuno para el día siguiente y en Torla a tomar unos huevos fritos "por su sitio" como si no tuviéramos nada que hacer en todo el día.
Rapel intermedio del barranco
Al final llegamos a nuestro destino, en la pista de Bujaruelo poco antes del camping. En el otro lado del río se ve desplomarse una espectacular cascada desde lo más alto con cerca de 150 metros de desnivel, ese es nuestro objetivo.
Pasamanos para salir a la vertical y montar el primer rapel
Aparcamos junto al puente de Santa Elena donde la pista cambia de orilla, hay trafico por "un tubo" que levanta polvo a "capazos" y nosotros nos encargamos de respirar.
El cierre del acceso a la pradera de Ordesa con vehículo privado hace que los "domingueros" reusen tomar el autobús y se metan en coche por donde les dejan.
A este trasiego de coches hay que añadir la gente que ignorando el estupendo sendero que va por el bosque recorriendo el valle lo hace andando por medio de la pista "chupando" polvo, ¡pobres!
Descendiendo el primer rapel del salto
Preparamos el material y unas pesadas mochilas con 240 metros de cuerda además de neoprenos y "ferretería" variada.
Echamos mucho de menos a Bea, que no pudo venir, nos hubiera venido estupendamente para que nos llevara su parte de cuerdas, jejejeeeee......¡¡¡
Después de una hora andando con pendientes fuertes llegamos a la cabecera del barranco, los tritones invadían las pozas, corría poca agua y resbalaba mucho. Empezamos el descenso en "sesión de tarde", a pesar de que no nos metimos prisas como solo eramos dos y muy "buenos" avanzamos rápido.
Salida desde la faja para bajar el ultimo rapel
El barranco hasta el salto final no es muy interesante, los rapeles son algo escabrosos y muy resbaladizos, llegamos al estrechamiento que da salida al salto, ¡vaya patio!. Empezamos a pensar como vamos ha hacer las cosas y nos ponemos de acuerdo, pues una vez baje uno no nos vamos a oír.
Barajamos también posibilidades como que ocurriría si nos pasáramos la reunión intermedia y como lo solucionarlo sin llamar al 112.
Nacho descendiendo el ultimo salto
Salgo el primero por un aéreo pasamanos sin repisas sobre el vacío al final del cual te puedes poner de pie utilizando un pedal de cuerda. Monto una primera reunión alargable y bajamos 45 metros hasta una instalación oxidada colocada en la misma vertical sobre una pequeña repisa.
Otro rapel volado de 25 metros nos deja en una faja con otra instalación, por fin un ultimo rapel de 55 metros nos deposita en los pies de la cascada.
En poco más de dos horas descendimos el barranco completo pero por cada persona más que baje en el grupo se aumentaran bastante los tiempos.
Perspectiva del ultimo rapel
Con la sensación de haber "sobrevivido" al barranco lo celebramos y nos reafirmamos en lo "buenos" que somos.
Recogemos y con todo el material y el agua que ha empapado, en diez minutos llegamos a la furgo.
A la vertical del Salto del Carpín hay que meterse con las cosas muy claras y material de autorrescate, sabiendo bien que hacer en caso de tener problemas que previamente tendremos que haberlos anticipado.
La solución a un posible "marrón" es mucho más complicada que en un rapel normal de cualquier barranco "popular".
¡Estamos vivos!
Recogido el material y vestidos nos tomamos nuestra cerveza fría con patatas y seguimos viaje hasta Sallent de Gallego donde tuvimos tiempo de cenar tranquilamente y disfrutar del correspondiente helado antes de subir a la Sarra para dormir en la furgo de Nacho.
Al día siguiente ascenderemos al pico Palas 2974 m.
Reseña del barranco:
Más fotos: