CRÓNICAS MONTAÑERAS: Midi de Bigorre 2877 m.

domingo, 12 de abril de 2015

Midi de Bigorre 2877 m.

Viernes 3 de Abril:

Pic du Midi de Bigorre 2877 m.

Con esquís desde La Mongie

Hoy es nuestra segunda jornada de actividad en La Mongie, hemos reservado el día para la ascensión "estrella" al Pic du Midi de Bigorre. Supuestamente la meteo se prevé buena estropeándose en días venideros, ni hoy fue estupenda del todo ni evolucionó a peor, sino más bien todo lo contrario.
Cuando en Zaragoza buscamos información de la ascensión al Pic du Midi desde La Mongie no encontramos reseñas detalladas ni tracks de la ruta colgados en Internet, solo algún reportaje fotográfico sin detalles.

Ascendiendo desde las pistas de Barèges vemos la gigantesca antena

Sabíamos que era posible, con subes, bajas y pendientes fuertes, incluso estuvimos tentados de ir a la "aventura", pero al final la cordura nos obligo a ir seguros.

El itinerario "normal" con info en Internet parte de Barèges, situado en la otra vertiente del Col du Tourmalet. En verano una tortuosa, estrecha y vertiginosa carretera une ambas poblaciones en apenas diez kilómetros, para invierno el puerto es dominio esquiable de la estación "Grand Tourmalet-Barèges-La Mongie", la más grande del Pirineo Francés, y la carretera se transforma en pistas de esquí.

Valle por el que subimos desde Barèges

Para acceder en temporada invernal de Barèges a La Mongie con vehículo es necesario bajar hasta Lourdes y volver a subir recorriendo un montón de kilómetros, osea que es más rápido esquiando.

Aunque la suma de desniveles acumulados aumentará ostensiblemente vamos a lo seguro y en próximas "expediciones" por la zona "experimentaremos con gaseosa".

La cumbre con su empinada pala final

Comenzamos a foquear en la parte alta de La Mongie donde la carretera se transforma en pista, ganamos altura directos al gran y evidente collado del Tourmalet que une ambas vertientes a 2100 metros de altitud.

Desde el puerto quitamos focas y deslizamos dirección Barèges por una pista a la sombra empinada y dura como el granito, no había ni "dios" bajando por allí y no me extraña. Controlando la postura y casi siempre derrapando, con una tensión del "copón" hasta llegar al sol donde cambia por completo el estado de la nieve.

La cima a vista de Zoom

No es necesario bajar hasta la base de la estación en Barèges, en el cruce de pistas junto al "Telesilla Tourmalet" en la cota 1750 m. atajaremos remontado primero por pistas y luego un vallecito hasta confluir con la huella que viene de Baréges a 1450 m.

Hace rato que divisamos nuestro objetivo con toda la parafernalia de torres, edificios y cúpulas gigantescas que pueblan la cumbre, el tamaño de esas construcciones es enorme con lo cual tenemos la percepción de estar siempre más cerca de lo que realmente falta.

Flanqueo del Lac d'Oncet

Hasta alcanzar la cubeta del gran Lac d'Oncet situado en las faldas del Pic du Midi, el recorrido es suave y sin problemas.

Para acometer el ascenso de la gran pala final debemos llegar al Col de Sencours por medio de un expuesto flanqueo sobre el lago. Todo el flanqueo esta a la sombra, hay muchas huellas de días anteriores, pasar con esquís y cuchillas será incomodo y peligroso, antes de meternos en un "berenjenal" ponemos crampones y progresamos seguros.

Pala final con el Col de Sencours y el Lac d'Oncet abajo

Conforme nos aproximamos al pico la "mítica" pala final se vuelve menos fiera de lo que parecía a lo lejos. Desde más abajo aquello se nos antojaba imposible, se asemeja a una pared completamente vertical, las pendientes más fuertes rondaran los 35 grados.

La dificultad es muy relativa y variará cada día según el estado de la nieve, con nieve dura es un suicidio, con nieve recién caída el riesgo de aludes altísimo.

Se aprecia la inclinación de la ladera

Las nubes velan el cielo impidiendo penetrar al sol y la "brisa marinera" que sopla no contribuye a una transformación rápida de la nieve, una primera capa reblandecida descansa sobre base dura, conforme ascendemos va desapareciendo para llegar a la cumbre sin que se puedan clavar las puntas de los bastones.

Aprovechando la "coyuntura" de la nieve "tiesa" afrontamos los 500 metros de desnivel del "palón" final con crampones. Antonio se pone los esquís pero acaba cambiando a los "pinchos" en la parte final que es la más inclinada.

Poco a poco vamos remontando la eterna pala que nunca acaba

La pala esta dividida en dos tramos por un hombro con un antiguo refugio abandonado, la Hôtellerie des Laquets, a partir de aquí se complica, aumenta la inclinación y la dureza de la nieve, cramponeando subimos muy bien.

Por fin alcanzamos la cima tras haber superado más de 1800 metros de desnivel acumulados desde La Mongie, nos percatamos de las grandes dimensiones de las antenas. Con terrazas panorámicas, un museo sobre la astronomía y la historia del Pic du Midi, un restaurante tradicional de montaña y una tienda de regalos, accediendo cómodamente desde La Mongie con un teleférico que te sube más de mil metros en quince minutos.

Paisaje nevado con el Neouville de fondo

Con el bono de pistas los esquiadores que se "atrevan" pueden subir en teleférico y esquiar por donde nosotros lo haremos, pero frescos como una "rosa". Pocos se aventuran, igual vimos bajar unos 25 en todo el día pero entre un día y otro queda la ladera hecha un patatal infumable.

No estuvimos apenas rato arriba, el tiempo empeora por momentos y nos da "acojone" solo pensar que la nieve se pueda endurecer.

Abismos bajo nuestros pies

Mientras comimos y disfrutamos la extensa panorámica que se contempla desde aquí, debatimos la forma de acometer el descenso. No parece muy seguro esquiar desde arriba, la salida es lo más peligroso y la nieve esta dura, los crampones ganan adeptos.

Pensando que hacer aparece en la telecabina una "chavalica" menuda y sola con los esquís al hombro, se planta en nuestras "narices", se pone los esquís con una soltura exquisita y desaparece bajo nuestros pies como quien anda por su casa.

Cimaaaaaaa.......¡¡¡¡

¿Pero que clase de maquina será esa tía?, preguntaba Antonio. Si ella ha bajado con tanta facilidad no debe de estar tan mal, nosotros podemos hacerlo igual, pero no mejor......

Visto lo visto cambiamos radicalmente de opinión y nos calzamos los esquís en la cima, Antonio se arma de valor y baja el primero derrapando hasta zona más segura, los demás le imitamos, fui yo el que peor bajo de todos, ¡¡¡lo que hace el miedo en la cabeza!!!

Construcciones enterradas en la nieve

En que dimos cuatro giros y cogimos confianza aquello fue pan comido, conforme perdemos altura todo mejora pasando de la tensión al disfrute.
Me he estado fijando en como esquía Anayet, este año ha mejorado una pasada tanto en técnica como estilo, la veo y "alucino" lo que ha progresado en tan poco tiempo, además no tiene miedo y la confianza le da el control necesario para superar pasos complicados.

Anayet llega a la cima

Pronto estamos en las pistas de Barèges, queda la ultima remontada al puerto del Tourmalet. Lo que por la mañana era una "pista" de hielo ahora es "chapapote", diría que ha pasado un tractor con un arado.
El sol pega de punta y nos exprime las ultimas gotas de sudor mientras foqueamos, por fin llegamos al Collado de Tourmalet a la vez que una densa niebla sube por la vertiente contraria.

Panorámica desde una terraza

Fugaz esquiada a La Mongie cansados pero con la satisfacción del objetivo cumplido. Tenemos un hambre y una sed "que te cagas", en cuanto llegamos al "Campo Base" "atacamos" a las cervezas y nos pulimos tres paquetes de patatas como acompañamiento.
Con el estomago tranquilo vamos duchándonos por turnos mientras el "Chez Rafa" cocina unos macarrones "por su sitio", hoy me "temo" que no saldremos de paseo por el pueblo.

Observatorio astronómico

En resumen, ruta de esquí que podemos clasificar de dificil pudiendo pasar a peligrosa si las condiciones no son favorables. Palas largas y de gran inclinación en las que hay que saber y poder controlar tras el desgaste de la ascensión.

Tal y como lo hicimos superamos 1800 metros de desnivel acumulados en 19 kilómetros recorridos que completamos en 7 horas y media paradas incluidas.
Estoy pensando en volver en otra ocasión, coger el teleférico y bajar media docena de veces. Mañana hemos programado una ascensión más corta y sencilla, el Soum de Marianette 2354 m.