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martes, 28 de agosto de 2012

Monte Perdido por Pineta

Intento de Monte Perdido desde el Balcón de Pineta

  Aprovechando la festividad del 15 de Agosto organizamos en plan "exprés" un viejo proyecto intentado hace años y acabo en fracaso por mal tiempo.


Martes 14 de Agosto:
Aproximación al Balcón de Pineta

  Me "escapo" del curro lo antes posible, cargo los trastos en el coche y voy a buscar a mi compañera de aventuras montañeras, Bea (secretaria). Sin parar viajamos hasta el fondo del valle de Pineta, aparcamos en la antigua zona de acampada previo pago de dos euros y nos ponemos en marcha rápidamente.
  Llevamos las mochilas super cargadas, comida para dos jornadas, ropa de abrigo, tienda de campaña, saco de dormir, esterilla "autopinchable", arnés, cuerdas, cintajos y algún hierro en previsión de posibles dificultades para subir la famosa canal de acceso a la parte inferior del glaciar. 

Desde el collado del Cilindro vemos la escupidera asomar en la niebla

  La información que tengo es muy confusa, crampones si, crampones no, canal fácil, difícil, con cuerda, sin ella, total que se nos ocurre entrar en el refugio de Pineta a preguntar.
  En el refugio han puesto un "garito" de una empresa de aventura para que pagues y te llevan, nos atiende unos de los guardas que "pasa" de nosotros como de la "mierda", ¿sera porque no estamos alojados.....?
  Sus respuestas, las pocas que dio, fueron una especie de "depende", puede, igual,......., lo único que sacamos en claro es que no hacían falta crampones, hasta nos dijeron que iba ha hacer mucho calor y nos "jodimos" de frío......, enfin, en los últimos años este refugio ha cambiado mucho, a peor¡¡¡

Bea sobre el ibón helado contemplando Ordesa

  Comenzamos la ruta sin perder tiempo, queremos llegar con luz para encontrar buen sitio donde acampar. Bea va delante y sube a buen ritmo sin aflojar, en tres horas estamos en el emplazamiento elegido muy cerca del ibón de Marboré montando la tienda.
  Sopla viento y hace frío, nos damos prisa y adentro a cenar. Pronto estamos metidos en el saco y tumbados, nos pegamos de "charrada hasta la una de la madrugada, el viento arrecia y zarandea la tienda, "desconectamos" para intentar dormir.

Bajando salimos de la niebla, vemos el ibón de Marboré y Tucarroya

  A las tres de la mañana me despierto sobresaltado con la lona aplastada sobre mi y presionando con fuerza, intento apartarla y casi ni puedo, la primera impresión fue que alguien se había caído encima de la tienda, pero no, era una especie de huracán con rachas exageradas.
  Bea y yo nos miramos "acojonados", ¡dios mio que es esto!, sujetamos las varillas como podemos hasta que de repente otra racha salvaje "chafó" la tienda y empezamos a oír como se partían las varillas, a su vez las varillas astilladas rajaron el sobretecho quedando la tienda destrozada.

El valle de Pineta a vista de pájaro asoma entre la niebla

  Aguantamos como pudimos bajo la lona sacudida a lo bestia agarrando las varillas para evitar que nos hicieran daño en la cara, no nos atrevimos a salir, el viento nos hubiera tirado. En algún momento las caras de situación limite se transformaron en carcajadas al vernos en semejante situación, reír por no llorar, porque gracia no tenia.
  En este estado y sin pegar ojo "sufrimos" varias horas hasta que amaino, salí fuera a intentar recomponer la tienda para tener algo de hueco y respirar, el cielo estaba completamente despejado, se veían estrellas a "mogollón".

Miércoles 15 de Agosto:
Collado del Cilindro

  Siete de la mañana suena el despertador, continuamos despiertos, apenas hay luz, "buceo" por los restos de la tienda buscando la puerta, saco la cabeza y sorpresa, hay una niebla densa que no deja ver ni la piedra de enfrente.
  Esto es el colmo, vaya mala suerte estamos teniendo, para más "inri" había anunciado buen tiempo hasta ultima hora de la tarde que se formarían tormentas.
  Aguantamos una hora más bajo las lonas, decidimos salir de allí no fuera que se echara a llover y termináramos con todo calado.
  Vemos gente que ha dormido en Tucarroya bajando, después de lo que hemos pasado nos resistimos a abandonar, es muy probable que la niebla levante y termine soleado, lo intentaremos. Siguiendo mojones y guiados por el GPS nos dirigimos al glaciar, un trazo de senda bien marcado atraviesa la morrena a estrellarse con las paredes de roca bajo el glaciar que aparece de repente. 

Escalón inferior del glaciar

  La senda nos guía sin  perdida a una canal marcada con palos, mojones y pintura roja, no nos cabe duda, por ahí tenemos que subir, examinamos la trepada y parece sencilla, no nos molestamos en sacar la cuerda.
  Con el suelo seco se puede subir sin material, bajar es más complicado pero tampoco problemático, otra cosa seria con el suelo mojado..... A pesar de ser fácil no deja de ser expuesto, si te caes te la pegas bien, así que lo de la cuerda lo dejo a elección, en un día bueno de verano yo no aconsejaría portearla.
  La canal esta instalada con dos reuniones equipadas con químicos y señalizadas con círculos de pintura roja, en principio haría falta una cuerda de 40 metros pero con una de 30 sobraría destrepando un pequeño tramo.
  De ascenso hay que tener en cuenta que aunque llevemos cuerda siempre deberá subir un "Rambo" a ponerla a "pelo" y asegurar al resto.

Perspectiva de la canal que trepamos y destrepamos equipada para rapelar

  La niebla no levanta, nos estamos perdiendo unas vistas de lo mejor del Pirineo. Escondemos las cuerdas, arneses y hierros en una piedra y seguimos subiendo sin peso, vamos bordeando el glaciar sin pisarlo pero llega un momento que hay que cruzar un tramo de unos cien metros obligados.
  Hace frío, la nieve no es nieve, es hielo duro como la piedra, no llevamos crampones, apenas tiene pendiente así que nos arriesgamos a pasar.
  Las rocas cambian por una empinada pedrera, buscamos las piedras más grandes y la menor pendiente para evitar resbalar hasta dar con un zig zag de senda que nos lleva cómodamente al mismo collado.
  En el collado del cilindro sorpresa, viento muy fuerte del sur que nos deja tiesos, no hay niebla pero si abundantes nubes altas y negras, la cima de Monte Perdido esta cubierta.
  La visibilidad es buena hacia abajo, vemos Ordesa, el ibón helado a nuestros pies y parte de la "escupidera", visto lo visto y sabiendo la previsión de tormentas, abandonamos. El trozo que nos falta ya lo conocemos, además tendremos que repetir esta ascensión un día despejado y saber que es lo que se ve, aprovecharíamos también para hacer los picos de Astazu.

Ya de bajada a Pineta logramos ver parte de Monte Perdido y el Cilindro

  Volvemos a la niebla, a poco que descendemos amaina el viento, por la pedrera bajamos a toda pastilla, perdemos altura sin enterarnos. Cruzamos de nuevo el nevero algo más blando y llegamos a la canal. Destrepamos sin usar material, recogemos primero todo lo escondido en las mochilas y bajamos mejor de lo que parece. A Bea le encanta trepar y destrepar, controla con estilo, cosa que a mi no se me da, la veo tan segura que no me preocupo por ella, solo me encargo de mi mismo.
  Llegamos junto a los restos de nuestra tienda (D.E.P), la niebla ha levantado pero sigue tapando las cumbres, comemos algo y recogemos para descender cargados a Pineta.

Espectaculares vistas sobre el valle de Pineta

  Como de costumbre Bea va delante, baja al trote palillero, tiene ganas de llegar y quitarse el peso de encima, vamos adelantando a todo el que aparece por delante, por fin llegamos al coche.
  Terminar de quitar botas, cambiarnos de ropa y como siempre tengo mi querida nevera con latas frías y picoteo, no hemos terminado con el picnis cuando de repente descarga una fuerte tormenta, ¡bufff....., menos mal que nos dimos la vuelta!, sino ahora estaríamos calados.
  Nos queda el viaje de vuelta a Zaragoza, cansados pero contentos, ¡hemos "sobrevivido"!

Reseña de la ascensión:

Track  hasta Monte Perdido por Pineta para GPS y ver la ruta en Google Eart:

Otra de nuestras ascensiones a Monte Perdido:

 

lunes, 20 de agosto de 2012

Monte Perdido 3355 m.

Viernes 27 de Julio:
Aproximación a Góriz desde Nerín

  Ultima y actividad estrella de la Multiaventura Tebarray, Monte Perdido, realizada en dos días andando integramente ida y vuelta desde Nerín, sin autobuses que te suben por pistas forestales ni "aberraciones" similares con animo de lucro personal en espacios "protegidos".
  Tras realizar una "ardua" labor de información y mentalización sobre esta larga y dura travesía con los chavales se les despertó una gran ilusión, a alguno le traiciono el cansancio acumulado. Tras "sofocar" estos pequeños "amagos" de pereza pasajeros planteamos a los "desertores" que solo tenian dos opciones, o hacer cumbre, o quedarse en Goriz a esperar, hasta Goriz era obligatorio. Lo que no íbamos a consentir es que unos "adolescentes" desganados se quedaran dos días seguidos en el campamento "vegetando".

Llegando a Cuello Gordo

  Con estas premisas partimos con las furgonetas dirección a Ordesa, "estrenamos" la nueva carretera de Yebra de Basa a Fiscal que acortó considerablemente el aun así largo viaje.
  Paramos en Broto a comer y dimos media hora de reposo antes de empezar la dura y larga aproximación.
  Concluimos el viaje a Nerín, pasamos el pueblo y subimos por la pista forestal un par de kilómetros hasta la barrera que cierra el paso donde aparcamos. El cielo estaba amenazando lluvia, no estaba nada claro, no había marcha atrás, teníamos que arriesgarnos. Con un gran mochilón cada uno, tiendas de campaña, sacos, esterillas y comida para dos días nos pusimos en camino.

Esther y Paula contemplan la Cola de Caballo en el fondo del valle

  No pisamos apenas la pista forestal, atajamos por senderos continuamente que acortan mucho hasta Cuello Arenas. En el tramo a Cuello Gordo cambia radicalmente el paisaje, asoma el Perdido cubierto de nubes. Parecía que se iba a caer el cielo a trozos pero apenas cuatro gotas sin importancia nos pillaron en el camino. Pasado Cuello Gordo faldeamos Sierra Custodia rodeando el circo de Soaso hasta llegar al refugio de Góriz.

 Nuestro Campo de Ataque perfectamente montado a 200 metros del Refugio

  En cuatro horas a paso tranquilo completamos el recorrido. Plantamos las tiendas a 200 metros del refugio en unas terrazas con unas vistas magnificas sobre el valle. Los chavales subieron estupendamente, cargados como mulas sin quejarse para nada.
  Cenamos y nos recogimos en las tiendas, antes hicimos una pequeña visita al refugio para rellenar agua, es el único punto del camino donde podemos abastecernos, esta todo el monte especialmente seco, no llueve desde hace más de un mes. Solo quedaba esperar que no cayera precisamente esa noche la tormenta del siglo arrasando nuestras tiendas.

Sábado 28 Julio: 
Monte Perdido 3355 m. y regreso al campamento

  Hubo suerte, apenas llueve, a las 6,30 " diana floreada", hay nubes altas que cubren todas las cimas, seguimos adelante con el plan previsto. 
  A los chavales les cuesta un "huevo" moverse, son más lentos que el "caballo del malo", no paramos de achucharles y aun así tardamos hora y media para ponernos en marcha. 
  Hemos desmontado tiendas y escondido los sacos y ropa que no necesitamos para no acarrear peso innecesario, la normativa del parque Nacional solo permite montar tiendas desde el anochecer hasta el amanecer.

Con las luces del amanecer comenzamos la ascensión

  Damos la opción a los "desertores" de quedarse en el refugio a esperar nuestro regreso, pero habiendo subido hasta allí nadie quiere "rajarse", lo peor ya esta superado. Salimos el grupo completo a por la cumbre.
  Sin prisa pero sin pausa vamos progresando hacia lo "negro", hace frío y se anda bien. Llegamos al Ibón helado, que no esta helado, desde donde divisamos la interminable pendiente de la "escupidera". Es entonces cuando a Leti le da un "ataque" y empieza a decir que no, que no, que nooo..... Con palabras "sutiles" y un poco de "cariño", le doy a entender que o sube o le hago subir a "patadas", pero que aquí "abandonada" no la vamos a dejar y no me pienso quedar con ella. Al final "reacciona" y sube mejor que los demás a los que ha hundido la moral con sus protestas.

Afrontando el final de la escupidera con el ibón helado y el Cilindro al fondo

  Con un frío que te "cagas" más propio de invierno que de estas fechas y con poca visibilidad coronamos nuestro objetivo. Eufóricos en la cumbre, "alucinan" con ellos mismos, muchos creían que no iba a ser capaces y lo habían conseguido, una gran alegría se contagiaba entre ellos.
  Estuvimos un buen rato arriba, abrigados con toda la ropa, comimos e hicimos abundantes fotos, la niebla deslució mucho esta "hazaña", pero la montaña es así.
  Nos quedaba el nombramiento de la gran mayoría como Caballeros de los "Tresmiles", excepto Anayet, Fran y David que son "tresmileros" confirmados.
  Organizamos una gran y solemne ceremonia con el asombro de otros montañeros que la presenciaron con curiosidad. 

La niebla nos engulle llegando a la cumbre

  Nos quedaba lo peor, el descenso, tenemos que bajar 2200 metros de desnivel en una tajada hasta las furgonetas, la segunda mitad con mucho peso a la espalda, y viajar al campamento en Ansó. Hasta Góriz donde teníamos las tiendas, sacos y esterillas fue muy bien, cargamos las mochilas y continuamos.
  Con todo lo malo que es bajar semejante desnivel con tantísimo peso fue mucho mejor de lo esperado, relativamente rápido estábamos todos en las furgos, eso si cansadisimos, en el viaje de vuelta se quedaron todos "fritos".

Nombramientos de "Caballeros de los Tresmiles" en la cima de Monte Perdido

  En el campamento esperábamos un recibimiento triunfal como "héroes" pero lo que encontramos fue peor. A parte de no tener recibimiento, que era lo de menos, las tiendas de los chicos que son unos descuidados, mas "tontos" que otra cosa, las dejaron mal cerradas.
  Aquella noche en Ansó descargo el diluvio universal convirtiéndolas en unas balsas con la ropa flotando. Las chicas fueron más inteligentes, no les entro ni una gota.

Todo el grupo en el vértice de la cima "muertos" de frío

  Este incidente apagó un poco el éxito de la expedición, pero todo tiene arreglo, utilizamos el pabellón de charlas como dormitorio colectivo y el sol por la mañana se encargo del secado.
  Al día siguiente estaba previsto desmontar nuestra parte de campamento y regresar a Zaragoza, de camino queríamos recorrer la vía ferrata de la Canal del Palomo. Debido al retraso que acumulamos por la inundación dimos por concluidas las actividades de montaña dejando la jornada completa para recoger y viajar a Zaragoza más tranquilos.

De regreso a Nerín con las mochilas bien cargadas

  A Oscar y a mi nos quedaba descargar el material y devolver las furgonetas, dando por finalizada esta Multiaventura Tebarray 2012 con un autentico éxito, "cero muertos" y todos super contentos deseando que llegue ya el siguiente verano.

Reseña para subir a Monte Perdido desde Goriz:

Track para GPS y ver la ruta en Google Eart:

Pagina Web de Góriz:

Otra de nuestras ascensiones a Monte Perdido con esquís:

lunes, 25 de abril de 2011

Monte Perdido 3355 m.


  Comienza la Semana Santa y tenemos un plan muy ambicioso que el mal tiempo se va a encargar de "torpedear", aun así lo intentamos.
  El miércoles por la tarde ponemos rumbo a Ordesa Nacho (el patillas), Rafa (el freerider) y yo. Hacemos noche en el albergue de Linas de Broto, el Último Bucardo, comenzamos nuestro "tour gastronómico" con una buena cena devorando todo que nos ponen delante.

Jueves 21:
Monte Perdido 3355 m.


  Los inconvenientes empezaron hace días cuando por la escasez de nieve cerraron las pistas de fondo en Fanlo y como consecuencia el acceso por la pista forestal de Nerin que sube hasta ellas desde donde se puede hacer la aproximación a Góriz con esquís de la forma más sencilla.
  El plan "B" de acceso es desde Torla recorriendo todo el valle de Ordesa. Para más "inri" el día que subimos no dejan llegar hasta el aparcamiento de la pradera en vehículo particular y tenemos que tomar un autobús en Torla a las 7 de la mañana, en el que vamos solos con el chófer.

La famosa cascada de la Cola de Caballo

  A las 7,30 comenzamos a recorrer el valle con unas pesadas mochilas en las que llevamos los esquís y botas a cuestas, subimos con calzado de verano porque no hay nada de nieve hasta pasado el refugio.
  El cielo esta negro y se pone más conforme avanzamos, en las Gradas de Soaso empieza a gotear, Nacho no esta dispuesto a portear los esquís para subir al refugio y volver a bajar al día siguiente sin haber hecho nada. Paramos desmoralizados, hay un instante de titubeos, decidimos llegar hasta la Cola de Caballo y regresar. Tenia pensado el titular de la Crónica: "Cola de Caballo con esquís" (a cuestas).

Preciosa vista de Ordesa desde la parte superior de las clavijas

  Llegamos a la cascada y paramos a hacer fotos, Rafa se aburría y subió por las clavijas de Soaso, mientras tanto se abren claros y sale "algo" el sol. No sabemos porque pero el sol tiene efectos "dopantes" sobre nuestro animo, hacemos bajar a Rafa, cargamos los mochilones y nos aventuramos por las clavijas dirección Góriz.
  En Góriz nos presentamos y con el cielo igual de negro ni lo planteamos, casi a la una de la tarde iniciamos el ascenso a Monte Perdido, nos recuerdan en el refugio que a las siete se cena. 
  Tras portear unos 20 minutos ¡por fin!, encontramos nieve continua con base dura y una fina capa de nieve nueva húmeda por la que se progresa muy bien. A 2600 m. nos traga la niebla y nieva con ganas, la temperatura es agradable, no hace viento y seguimos.

El refugio de Góriz con las obras de ampliación

  El lago helado ni se ve, con el GPS en mano encauzamos la ruta. Subimos la escupidera con esquís hasta llegar a los tramos más expuestos donde cambiamos a crampones. La nieve vieja esta dura pero la fina capa recién caída a veces hace zueco e impide que los "pinchos" muerdan provocando resbalones. 
  Despacio y con mucho cuidado Nacho abre la huella entre la niebla, ni siquiera vemos los abismos que sabemos se abren a nuestros pies, por fin llegamos a la cumbre. 
  Parece que quiere despejarse pero no, lo único que vemos es la punta del vértice geodésico sobresalir en la nieve, foto y descenso sin perder tiempo para utilizar nuestra huella antes que desaparezca.

La nieve continua empieza 150 metros por encima de Góriz

  Tras unos momentos de suspense estamos "salvados", ponemos esquís y deslizamos por la parte baja de la escupidera sin ver nada pero con la mejor calidad de nieve que hemos tenido, me atrevería a jurar que en toda temporada.
  Conforme aumenta la visibilidad lo hace también nuestro disfrute, el estado de la nieve se mantiene todo el descenso, en poco rato estamos de nuevo en Góriz con Monte Perdido coronado de una tirada desde la pradera de Ordesa y con el tiempo de sobras para cenar.

Cumbre de Monte Perdido, no vemos nada

  En resumen 2045 m. de desnivel total ascendido, sin contar paradas tres horas hasta Goriz y otras tres y media hasta la cumbre. El descenso de la escupidera con crampones y el resto esquiando hasta el refugio en una hora.
  Solo nos quedaba la cena y a dormir porque mañana queremos subir al pico Marboré y bajar a Torla, aunque los planes no saldrán como pensamos. Destacar y agradecer la amabilidad de los actuales guardas del Góriz, algo inusual en la mayor parte de los refugios de la federación.

En un momento que aclara pasamos los tramos más expuestos de la "escupidera"

Viernes 22:
Descenso a Torla

  Nos levantamos a desayunar en el estupendo "autoservicio". Esta cubierto y lloviendo, esperamos a ver si se abre pero al final nos "rendimos" ante la evidencia, aquello va de mal en peor.
  Dedicamos el día a "bañarnos" bajo la lluvia mientras regresamos a Torla. Las clavijas mojadas están algo más "emocionantes" pero se bajan bien a pesar de ir muy cargados.
  En el camino a la Cola de Caballo nos cruzamos con cientos de personas que no se han resignado a quedarse parados aunque llueva.

Descendemos lloviendo por las clavijas de Soaso

  Unas cervezas en Torla junto a unos amigos que nos hemos encontrado en el retorno ponen fin a esta primera parte de la lluviosa Semana Santa. 
  Nacho regresa a Zaragoza, Rafa y yo dormimos en el albergue Mora de Nuei de Ainsa. Esta situado en el centro del casco antiguo, nuevo y moderno, tiene una gran cocina y comedor para hacerte tu propia comida y lavadora con secadora. Nosotros optamos por bajar al pueblo a dar una vuelta y cenar.

Reseña para subir al refugio Goriz por Ordesa:

Reseña para subir al refugio Goriz por Nerín:

Pagina Web del refugio para reservar:

Reseña para subir a Monte Perdido:

Track para GPS y ver la ruta en Google Eart:

Más fotos: