lunes, 21 de junio de 2010

Cuculo 1552 m. y San Salvador 1546 m.

Sábado 19 de Junio:
Barranco de la Carbonera - Cuculo 1552 m. 
- San Salvador 1546 m. - Pradera de San Indalecio 

 
El sábado salí rumbo a Zuriza en el valle de Ansó con Oscar (el destalentao). Habíamos quedado en el camping con algunos de los actuales monitores del Campamento Tebarray para acompañarles a conocer las rutas de montaña que recorrerán con los chavales durante el campamento de verano.

Barranco de la Carbonera

Conforme nos acercábamos al Pirineo aquello se ponía negro y más negro (para variar), en el campamento recogimos también a Juan (el padre) que venia desde Jaca.

Paredones en San Juan de la Peña

En Zuriza diluviaba sin parar, lo mejor que se nos pudo ocurrir fue tomarnos unos huevos fritos con lomo y patatas mientras pensábamos un plan "B" que no solucionaría las marchas pero por lo menos "estiraríamos las piernas".

Lomo final a la cima

Como sabia que el prepirineo estaba despejado propuse una ruta en la zona de San Juan de la Peña por los picos Cuculo y San Salvador.

Todos en la cumbre del Cuculo

Ascendimos desde una curva de la carretera por el barranco de la Carbonera primero al Cuculo y luego al San Salvador, desde allí recorrimos toda la sierra por el lomo hasta el monasterio nuevo en la pradera de San Indalecio donde habíamos dejado previamente un segundo coche.

Vértice del pico San Salvador

El tiempo se estropeo durante la marcha pero no llego a llover, el frío y el viento en algunos momentos era "de preocupar" y la visibilidad que es uno de los puntos fuertes de esta "agradecida" excursión era más bien escasa.

Ermita de San Salvador

Nos costo el recorrido total más de cuatro horas porque lo hicimos a marcha de "tortuga mareada", aunque la mayoría estaban medianamente en forma, un par de chicas "dejaban mucho que desear". Les hacíamos la "parada del hijoputa", esperábamos y en cuanto llegaban arrancábamos.
Aconsejaría un "régimen alimenticio estricto" y un buen programa deportivo para evitar morir antes de los treinta de un infarto o algo peor.

Camino al Monasterio Nuevo siguiendo el cordal

Con nuestro plan "B" salvamos el día. Regresamos a la campa de Tebarray en Ansó, plantamos tiendas de campaña y pasamos una "húmeda y fría" noche sin parar de llover. Suponíamos (mal) que al día siguiente el tiempo nos permitiría realizar las excursiones previstas.

Monasterio Nuevo y Peña Oroel

lunes, 14 de junio de 2010

Cumbres de Astún

  El viernes por la tarde viajé a Villanúa (Huesca), tenia que ir a dormir al albergue el Tritón para llevar el sábado a un grupo de 40 escolares entre 7 y 8 años a escalar y hacer rapel.

Sábado 12:
Multiactividad en Villanúa

  Amaneció lloviendo, casi nos volvemos locos para entretener en el escaso espacio del albergue a tantos "enanos hiperactivos". 
  En un hueco de sol aprovechamos para montar un rapel en la fachada desde el ultimo piso a la calle, ademas de un taller de nudos, otro de material de montaña, varios juegos y manualidades salvando la mañana mejor que si hubiera salido el "plan A".

Sin miedo y controlando
  El rapel con salida desde el balcón de la tercera planta, unos doce metros de altura, lo bajaron casi todos para regocijo de los turistas y lugareños que les fotografiaron y aplaudieron.
  Por la tarde la lluvia dio otra pequeña tregua y aprovechamos para montar otro rapel en un puente cercano al polideportivo, tiro con arco y juegos "de correr".

Máxima concentración en la salida
Albergue el Tritón:

Más fotos:
Rapel en Villanúa


Domingo 13:
Cumbres de Astún
Monte Astún 2141 m. - Pic D´Arnousse 2141 m. - Pic de Bénou 2271 m. - 
Pico Belonseiche Sur 2258 m. - Pico de Belonseiche 2297 m. - 
Pico Escalar Occidental 2262 m. - Punta L´Escalar 2283 m. - 
Pico de los Monjes 2349 m.

El pico Aspe emerge entre la niebla
  El domingo solo tenían una pequeña actividad de senderismo que no requería mi colaboración, así que me fui a la frontera del Somport para hacer un recorrido por las cumbres del cordal fronterizo hasta el pico de los Monjes.

 Pico de Arnousse
  El plan inicial era que subiera el patillas en el día desde Zaragoza con otros amigos para organizar un descenso de barrancos en plan "cursillo". Vista la meteorología prevista cambiamos el plan de barrancos para evitar "morir ahogados" por otro de "senderismo de consolación".
    Por supuesto nadie quiso acompañarme para no arriesgarse a venir solo para ver llover, prefirieron quedarse en casa a "tocarse los huevos" y ver la tele. 

Pico de los Monjes
  Cuando llegué a la frontera la típica niebla que sube por Francia cubría todo y a ello se sumaba nubosidad alta pero no llovía, así que empecé la marcha. En este recorrido coroné la cumbre de 8 picos acabando con el de los Monjes y regresando por el ibón Escalar. 
  Si hubiera hecho mejor tiempo tenia pensado continuar al pico Astún, Malacara y seguir el cordal hasta la Raca bajando por las pistas de esquí. 
  No me había mojado aun, el cielo se ponía cada vez más negro y escapaba alguna gota, corté el recorrido en los Monjes y tira para abajo hasta Astún que en estas fechas parece un pueblo fantasma.

Ibón Escalar
  Solo me quedó recorrer un pequeño tramo de carretera hasta el coche y vuelta a Zaragoza.

Reseña de la ruta realizada pero en dirección contraria:

Track para GPS y ver la ruta en Google Earth:

Más fotos:
Cumbres de Astún

jueves, 10 de junio de 2010

Vignemale

 El fin de semana ha sido una "ruina", el sábado tuve que "currar", el domingo fui con Nacho y Víctor a Benasque con intención de subir a las tres Maladetas y la Torre Cordier en circuito, lo único que hicimos fue "ver llover" y desayunar "tres veces" antes de regresar a Zaragoza sin sacar los esquís del coche.

Martes 8:
"Casi" el Vignemale con esquís.
"Huelga de Funcionarios" y fin de la temporada de esquí.

  El martes teníamos convocada "huelga" en el trabajo nos acogimos a ella y aprovechamos para cerrar la temporada de esquí. 
  Llevábamos varios fines de semana dándole vueltas a una clásica que repetimos casi todos años para fin de temporada, el Vignemale, el mal tiempo nos obligaba a retrasarla.

Nacho "ahogando" los tallarines

  Al final nos decidimos. 
  El lunes nada más comer salíamos de Zaragoza los "huelguistas" y algún "jeta" dispuestos a poner la "pancarta" en la cumbre. 
  En la furgo de Nacho (el patillas) iba Rafa (el freerider), Isidro (cachocabroncarapija) y yo. 
  Víctor (el melenas) con su coche recogió a Sara (la rescatadora) en Sabiñanigo, todos juntos completamos el "tortuoso" viaje hasta Gavarnie, la parte francesa del pirineo de Ordesa.

Flanqueando el embalse

  A las diez de la noche llegamos al final de la pista en el valle de Ossoue junto al embalse donde se comienza la ascensión.    Estábamos completamente solos en un sitio donde los fines de semana siempre hay "marabunta" para estas fechas, ¡como me gustaría ser "ocioso" de profesión!.

Bonita cascada al entrar en el barranco

  Establecimos el "campo base" y nos pusimos a preparar la cena que consistió en unos tallarines "flotando" que "ahogo" Nacho y una estupenda y surtida ensalada que conjunto Isidro. Como es tradicional después de cenar tomamos el desayuno de la cena para el que habíamos comprado abundante "material".

Encima de la cascada ponemos esquís

  Nacho y yo nos acomodamos para dormir en la super cama de la furgo, Víctor en su coche, Sara, Isidro y Rafa en la pequeña cabaña que hay junto a la presa. Estuvo casi toda noche relampagueando y lloviendo, amaneció con nubes muy negras y amenazantes por los cuatro costados.

Foqueamos por el barranco encima del cauce

  Mientras mirábamos al cielo sin saber que hacer tomamos otro estupendo y abundante desayuno con bollería variada que no pudimos terminar. 
  Al final decidimos subir hasta que una granizada o "chaparrón" en el mejor de los casos nos obligara a dar la vuelta. La historia es que el día ni mejoro ni empeoro, subimos y subimos hasta llegar al glaciar donde penetramos literalmente en el interior de las nubes.

Superando un tramo del barranco hundido y vista del itinerario seguido

  El porteo es más corto que para subir a las Maladetas por la Besurta, en poco más de media hora, superada la espectacular cascada nos calzamos los esquís que no fue necesario quitárselos más que un pequeño tramo para rebasar una parte del barranco con la nieve abierta. 

¡A lo negro!

  El recorrido de esquí va íntegramente por el fondo del estrecho barranco cubierto por los aludes bajo el que circula un gran torrente. El peligro es que se rompa el puente de nieve justo cuando pasas y "adiós mundo cruel" ahogado bajo la nieve. Las "pintas" eran de "mucha solidez", aunque realmente nunca sabes con certeza el riesgo existente.
   El recorrido alternativo es el camino de verano, un sendero excavado en la roca a gran altura en las paredes del barranco, parte esta cubierto de nieve y la opción es casi más expuesta que ir por el fondo.

No veo

  Tras salir del cauce unas empinadas palas y un flanqueo a media ladera nos dejan en el principio del glaciar donde penetramos en las nubes. 
  La nieve en buen estado, la temperatura no es muy baja aunque de vez en cuando soplan rachas fuertes de viento, decidimos seguir atravesando el glaciar que poco a poco va suavizando la pendiente.

Buen descenso ya bajo las nubes

  Superada la cota de los tres mil metros las protestas de quien no quería continuar se empiezan a "intensificar", para que no se rompa el "buen rollo" y llegar todos a Zaragoza "como amigos" (prioridad número uno) decidimos retirarnos, aunque las condiciones climáticas no han cambiado, son tan malas como al inicio. 
  Por lo que a mi respecta por los pocos más de 200 metros que nos quedaban, hubiera hecho cumbre, eso si, sin ver una mierda, pero la habría hecho. Tal y como nos paso en el Aneto tenia la esperanza de que terminaría despejando, no fue así. 
  Nunca he sido partidario de dejar bajar solo a nadie y menos en las condiciones que existían, ni siquiera era aconsejable partir el grupo en dos.

Bajo los pies de Nacho hay una cascada

  Con la nieve en buenas condiciones, el relieve apreciable por el coloreado rojizo que provocan los hongos en la nieve vieja, la esquiada no iba a ser mala. La zona la conocíamos muy bien, además llevábamos nada menos que tres GPS con el que poder retirarnos sobre nuestros pasos en el peor de los casos.

Esquiamos sobre el cauce

  En el descenso esquiamos 1200 metros de desnivel, apurando hasta las últimas manchas, en el barranco estaba algo dura la nieve, con un  poco más de calor hubiéramos disfrutado el doble. 
  En resumen, descenso disfrutón que en caso de buenas condiciones climáticas sería una "pasada", prácticamente con los esquís puestos hasta la cola del embalse, solo en dos ocasiones los quitamos para pasar tramos cortos sin nieve.

Lo bueno se acaba

    Nos esperaban las imprescindibles cervezas con patatas fritas que además acompañaron unos chipirones. Seguidamente preparamos la comida, otra super ensalada y unas judías con oreja y chorizo (de lata), para terminar con toda la bollería de los desayunos, casi reventamos.... (Faltó el vino de Isidro)
  A partir de mañana desintoxicación a base de fruta y verdura.

A pesar de los esfuerzos por "contentar" no debieron de ser suficientes, entre el buen ambiente y risas que hicimos en nuestro campo base, durante la comida hubo algún "morro" más parecido a un "berrinche adolescente" que a otra cosa.

  Nos quedaban "solo" las cinco horas de viaje para regresar a Zaragoza, buffff.......¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡

Reseña para subir al Vignemal desde Gavarnie:

Otra ascensión realizada tres días antes:

Track para GPS y ver ruta en Google Eart, con mucha nieve se va por el fondo del barranco:
Más fotos:
Vignemale