jueves, 19 de abril de 2012

Maladeta Oriental 3308 m.

  El viernes por la tarde me voy a Huesca, allí quedo con Sandra (la inefa) que se une a la expedición este fin de semana. Continuamos el viaje hasta mi apartamento en Campo (Benasque) donde montamos nuestro C. B.
 Llevamos una temporada con el tiempo bastante revuelto y hace que vayamos al monte con la incógnita de que va a pasar, porque ir vamos igual aunque den malo, de todo hay que aprender.
  Ideamos un plan inicial, Sandra quiere hacer su primer tres mil con esquís, elegimos el pico del Medio y el Coronas subiendo por la Renclusa y bajando por Aigualluts. 
  Sabemos que la previsión meteorológica para el finde es de mala tirando a peor, cenamos pensando que hacer. Lo ideal seria planificar un pico más corto y sencillo para tener más posibilidades de éxito pero resulta que no hay prácticamente ninguno con la nieve deseable, al final decidimos jugarnosla e ir al plan inicial.

Sábado 14:
Maladeta Oriental 3308 m.
Con esquís desde los Llanos del Hospital

   A las 7 de la mañana llega a Campo Javi (el vasco), tiene muchas ganas y ha viajado hasta aquí aun a sabiendas de que podemos terminar sin salir del coche, no como otros "cobardes" que se "rajan" en cuanto ven asomar una nubecita en el mapa del tiempo.

Comenzamos la jornada con un día agradable y soleado

  Las pistas de esquí ya han cerrado, el valle esta "desierto", sumado a que muchos "traveseros" no han venido por mal tiempo resulta que el monte queda para nosotros solos. Aparcamos en la puerta del hotel y nos sorprendemos al ver el cielo raso y despejado, ni una brizna de viento y tres bajo cero que se llevan muy bien.
  Comenzamos el foqueo al sol por las pistas de fondo que tienen nieve como en temporada alta.

Foqueando por el camino viejo a la Renclusa

  Nos desviamos por el camino viejo directos al refugio de la Renclusa, subimos a un ritmo aceptable, el día promete, estamos contentos. Poco a poco se va velando el cielo por el oeste, el sol lucha con las nubes y resiste, al llegar a la cota 2500 m. las nubes se adueñan y comienza a nevisquear ligeramente.
  Se nos baja la moral, no lo exteriorizo pero pienso que no vamos a llegar a ningún lado.
  Seguimos subiendo, Sandra que es una "pupas" comienza a quejarse, estoy cansada, tengo rozaduras........., y eso que es estudiante de educación física que si noooo...., ¡que mataos los de educación física!, si sk......¡¡¡¡ Le digo que se calle y no me hace caso, total, quejarse es gratis.

Pasamos junto al Forau y refugio de la Renclusa

  Estamos a la altura del portillón superior, no se ve nada y sigue nevando, esto va a peor tal y como estaba previsto, comemos algo y mientras tanto debatimos que hacer. Descartamos bajar al glaciar del Aneto, no podremos hacer cumbre y la vuelta por Aigualluts es una "calcetinada", lo más "sensato" seria volverse allí mismo y disfrutar algo del descenso antes de quedarnos sin visibilidad.
  Tras "divagar" un rato intentamos subir hasta la base de la Canal de la Rimaya para que la esquiada sea más larga, la nieve esta polvo POW como nunca en todo el invierno y cuanto más arriba mejor.

Trepando por la vertical Canal de la Rimaya

  Yo ya sabia que una vez bajo la canal iba a ser difícil volverse y así fue, ¿que hacemos?, ¿bajamos, no?, no se ve ni tres metros, yo lo que tu digas, a pues yo lo que digas tu, que decida Sandra......., y Sandra decide que quiere hacer un "tres mil", ¡vaya, me ha salido mal la jugada, pufffff...........!
  No lo veo muy claro, más bien no veo literalmente, pero Sandra es la que "manda", ponemos crampones y para arriba.

Últimos metros antes de coronar la Maladeta en medio de la nevada

  La nieve esta suelta y muy profunda, al principio de la canal nos arrastramos por un surco que dejaron dos franceses, los únicos que habían coronado, nosotros subimos a "cerrar".
  Sandra y Javi es la primera vez que progresan por un sitio tan empinado, sin miedo y con cuidado llegamos al collado, solo nos queda la ultima rampa antes de coronar este pico tan "agradecido", alpino y variado.
  No vemos nada, "saltamos" en la cima y nos "piramos" lo antes posible, tenemos suerte porque despeja algo, por un instante disfrutamos de vistas limitadas. 

Autorretrato en la cumbre de la Maladeta Oriental 3308 m. con cara de circunstancias

  Bajamos la canal de espaldas asegurando cada paso, la niebla se hace más densa, llegamos a los esquís siguiendo la huella, sino igual ni los encontramos.
  Apretamos botas para el descenso, no veo nada, voy delante siguiendo lo poco que queda de nuestra huella para enfocar algo de relieve y no terminar en el suelo. La nieve es estupenda, la mejor del invierno sin lugar a dudas, muy fácil de esquiar, hasta el portillón superior bajamos a ciegas.

Bajamos la canal de espaldas sin nada de visibilidad

  Tenemos suerte de nuevo, se abren claros, de repente vemos el glaciar entero, inmaculado y virgen, ni una sola huella, para nosotros solos, bajamos a toda pastilla levantando un surtidor de polvo a nuestro paso. Conforme descendemos la nieve va humedeciendo, pero es igual, parece que sepamos esquiar y todo, en pocos minutos estamos en la Besurta, se acabo lo bueno.

Ya casi llegamos a la Besurta, ¡estamos "salvados"!

  Nos queda "remar" por las pistas de fondo, se vuelve a nublar y retoma la nevada, ya no nos importa, el cansancio se nota, con calma y ya "salvados" llegamos a los Llanos victoriosos y felices.

¡¡¡FELICIDADES SANDRA, QUE BUENA ERES¡¡

    Volvemos a Campo donde nos despedimos de Javi, tras una cervecilla, ducharnos, comer y recoger el apartamento viaje a Zaragoza tranquilo, con poco trafico.

Reseña para subir a la Maladeta Oriental:

Track para GPS y ver la ruta desde la Besurta en Google Eart:


Otra de nuestras ascensiones a la Maladeta Oriental:



 

miércoles, 18 de abril de 2012

Punta Suelza 2973 m.

Domingo 8:
Punta Suelza 2973 m.
Intento desde la central de Ordiceto con esquís

  Este día que se anunció como el de mejor tiempo en toda la Semana Santa, para nosotros fue casi el peor. A las 6,30 de la mañana, hace tiempos que no madrugamos tanto para ir al monte, salimos desde Zaragoza en mi coche David Naval, Nacho (el patillas) y yo dirección Aínsa.

  Cruzando al otro lado del barranco por el puente de la central

  Tenemos previsto subir con esquís a Punta Suelza desde la central de Ordiceto pasando por el ibón de Ordiceto. Cuando amanece nos cambia la cara, el pirineo esta cubierto de nubes negras, como siempre hacía lo "negro", hacemos como que hay sol y continuamos el viaje.
  Parada en Aínsa a "atracar" la panadería y tomar unos cafés, ¡¡sino fuera por estos momentos......!!, casi como que no tenemos prisa porque imaginamos lo que nos espera arriba.

 Vista de la central hidroeléctrica, el embalse y la pista nevada por la ladera contraria

  Continuamos el viaje, pasamos Bielsa de largo, poco más adelante del desvío a Chisagües tomamos una pista a la derecha indicada como ibón de Ordiceto. Tiene 11 kilómetros, salva más de mil metros de desnivel y en verano, te permite llegar hasta el mismo ibón en coche, no suele estar en buen estado, mejor un todo terreno, si no lo tienes y aprecias poco tu coche puedes subir sin problemas.

Llegando al refugio junto al ibón de Ordiceto

  Tampoco contábamos con la pequeña nevada que cayó esta pasada noche, pronto hay nieve en la pista, no es mucho espesor y el Nissan sube bien, a 1800 metros de altitud y un kilómetro de la central desistimos continuar, haciendo el "animal" podemos seguir en coche pero no merece la pena en absoluto.
  Nos preparamos con el cielo cubierto, viento y nevisqueando, confiando en que el tiempo mejore iniciamos la marcha.

Punta Suelza esta completamente sumida en la niebla

  Se sube por la ladera contraria a la pista, por palas empinadas siguiendo más o menos el trazo de un tubo subterráneo por donde "tiran" el agua del ibón a la central. Hay algún tramo delicado, se han formado placas de viento y las cortamos con los esquís, pasamos de uno en uno hasta llegar a Ordiceto.
  En la orilla hay un pequeño refugio recientemente reformado, paramos a verlo y "recapacitar", nuestra cumbre esta tapada y no lleva pintas de mejorar, hemos subido poco desnivel, apenas nos "ganamos" el desayuno y por narices tenemos que tomar los correspondientes huevos fritos "por su sitio". No es cuestión de ir al monte y volver más "gordo", así que decidimos continuar por las "tinieblas" con el GPS a mano y hacer hueco en el estomago.

El refugio completamente reformado esta muy bien aunque algo sucio

  No vemos casi ni el "culo" de Nacho que abre huella delante, seguimos hasta colocarnos debajo de la empinada canal que sube al collado, en la cota 2550 metros. Blanco por arriba, blanco por abajo y blanco por los lados, no se ve nada, "abortamos" la expedición por motivos de seguridad, no se ve, esta nevando y esta pala es muy "aludosa" como para meterse sin saber por donde vamos.

Esquiamos por las tinieblas

  La vuelta esquiando es un mundo de sensaciones, mis ojos no enfocan a ningún lado, todo esta blanco, me mareo, los cambios de pendiente nos pillan por sorpresa, David da un "salto mortal" en cámara lenta y "sobrevive". Pasado el refugio mejora la visibilidad, aunque la zona de placas no nos "emociona", buscamos la forma de evitar las palas "criticas".
  En los tramos más bajos es donde disfrutamos, la nieve esta mejor y se ve, Nacho esquía pegando "berridos", parece que este "sabediosdonde", sin darnos cuenta llegamos al coche.

Palas por debajo del ibón con zonas de placas

  Como estaba "escrito" de vuelta parada en Aínsa a tomar nuestros "inmerecidos" huevos fritos, por lo menos comemos y nos lo pasamos bien, que es de lo que se trata.
  Regreso a Zaragoza que mañana es "día escuela".

Crónica de David Naval:

Reseña de la ascensión:

Otra de nuestras ascensiones a Punta Suelza:

Track para GPS y ver la ruta en Google Earth:

jueves, 12 de abril de 2012

Caillabet de Rébec 2209 m.

Sábado 7:
Caillabet de Rébec 2209 m. y Pic de L´Iou 2218 m.
Travesía circular desde el Portalet

  He quedado a las 8 en con David y Carlos, empiezo mal el día, no me suena el despertador y me despierto por casualidad, salgo volando medio dormido hacia Escarrilla. David ha propuesto una travesía circular por la parte francesa del Portalet con objetivo el pico Caillabet de Rébec, parece que hoy mejora el tiempo aunque no lo pronostican bueno del todo. 

Llegando al collado de Aneou con el Gradillere delante

  Partimos del aparcamiento francés en la frontera del Portalet, hay abundante niebla y poca visibilidad, a ver si tenemos suerte. David y Carlos se preparan echando virutas, traen las focas puestas de casa y no me he fijado pero juraría que han bajado del coche con las botas puestas y la mochila en la espalda, me tienen que esperar. Sin desayunar y a "matacaballo" corro tras ellos, alucinamos cuando vemos que no hay huella ni siquiera al pico Canal Roya.
  Carlos se pone en cabeza y traza la huella dirección al Col de Aneu entre los picos Gradillere y Arazures, vamos por la ruta al Canal Roya para desviarnos a la derecha bajo el pico Gradillere con algún sube y baja.

Esquiando al valle de Baight de Houer, trazando nuestra huella en nieve virgen

  La nieve esta profunda , húmeda e inconsistente, en una de las bajadas se me mete el esquí en un agujero y doy una voltereta "mortal" de cabeza, me agarro al bastón y me dejo caer. Acabo medio enterrado en la nieve, me sacudo porque se me ha metido hasta el pescuezo, cuando vuelvo a apoyar el bastón casi me la pego de nuevo, solo tengo un cacho, se ha partido en dos y falta un trozo, me pongo a excavar en la nieve con las manos para encontrarlo y empalmarlo con cinta americana.
  Se me hielan las manos y no aparece, saco la pala y cavo una trinchera como para enterrar un coche, hasta que consigo rescatar el resto del bastón. Con una sesión de "bricolaje" el palo como nuevo, continuo la marcha hacia David y Carlos que se aburren de esperar.
  Vamos buscando el trazo más favorable al collado, ya vemos el valle de Baight de Houer, la niebla no pasa del collado, observamos nuestro recorrido raso y despejado, tenemos el día ideal. 
  Quitamos pieles y hacemos la primera esquiada hasta el fondo del valle, nieve profunda y muy húmeda, para mi fácil de esquiar, bajo casi recto cortando la huella de Carlos, ni nos damos cuenta y ya hemos descendido 500 metros de desnivel.
  Volvemos a colocar pieles, las he guardado pegadas al cuerpo bajo la camiseta para que estén calientes y ahora pegan bien.

Vemos nuestro objetivo y el valle por donde subiremos

  Comenzamos a subir por empinadas palas que apenas conservan nieve, hacemos esquí-hierba hasta que cambiamos de orientación. Progresamos por un valle colgado bajo el Pene de Lapassa en dirección al visible Caillabet de Rébec. Hace calor, el sol pega de punta, no me he acordado de ponerme crema y me estoy torrando la cara a fuego lento, para más "inri" Carlos tira como un "poseso" incluso abriendo huella, yo les sigo pero sudo como un "bellaco", voy a echar corto de agua.
  Llegamos a la base del pico y elegimos una canal por detrás entre las dos cimas, primero nieve inconsistente y luego trepada por roca para salir a la cima, una inclinada losa en plan de trampolín al vacío. Subo a cuatro patas agarrándome con pies y manos, no me pongo de pie ni para hacerme la foto, por supuesto no "saltamos" en la cumbre, con hielo ni loco me encaramo ahí.

Llegamos a la base de la canal cimera

  Mejor opción para "atacar" esta cumbre es desde Astún, subiendo al pico Malacara bajaríamos desde la misma cima esquiando hasta el fondo del valle para enlazar con el itinerario de subida actual. Para regresar se podría hacer subiendo al pico Astú o al pico Astún, esquiando luego por sus inclinadas caras sur directamente a la estación, nos lo apuntamos para la próxima temporada.
  Para bajar destrepamos la canal y esquiamos por la cabecera del valle colgado desviamdonos enseguida al norte, por buenas palas llegamos a la cabaña de la Glere, primera parada del día a comer algo y relajarnos.
  La nieve escasea en estas cotas, mientras comemos observamos las rampas donde subiremos para enlazar manchas de nieve y foquear desde el mismo río.

La canal con hielo, nieve y roca

  Ultima remontada del día, 500 metros de desnivel nos separan del collado de L´Iou, me cuesta subir, Carlos sigue en cabeza incansable, me meto caña para no atrasarme, no me quedan clinex para limpiarme el sudor, he gastado dos paquetes, voy en manga corta, se me ha acabado el agua, menos mal que poco a poco se va nublando y una suave brisa hace mas llevadero el esfuerzo.
  El ascenso culmina en la cumbre del Pic L´Iou, desde la cima esquiando hasta el coche, o al menos es lo que nos creíamos. 

Descenso a la cabaña de la Glere, se acaba la nieve

  La esquiada no se le puede llamar así, fue un autentico "viacrucis". La pendiente es muy suave y hay varias hondonadas que se pueden evitar haciendo una media ladera pegados al pico Peygeret, el problema fue que esas laderas estaban peladas por el sol y nos vimos abocados a meternos en el "hoyo" con cantidad de penosos "subesybajas" hundidos en la nieve. La parte final estaba convertida en un autentico "patatal", poca nieve y piedras que salían por sorpresa donde menos imaginabas, más "trampas" que en la selva.

David y Calos en la cumbre del pico L`Iou con el Midi de Ossau al fondo

  Llegamos a los coche justo cuando se pone todo muy negro y empieza a nevar con ganas, ¡josplis, que buenos somos!, calculamos la "ventana" de buen tiempo a la perfección.
  Para ser un día incierto hemos hecho un "pedazo" de travesía considerable, la verdad es que  ha sido una autentica "calcetinada", bonito si, pero en las condiciones de hoy y por esta zona creo que no lo repetiré, aunque ya se sabe lo que dice el refrán, "Nunca dirás nunca jamas".
  Me despido de David y Carlos y regreso a Zaragoza, mañana he quedado con Nacho (el patillas) y David otra vez para subir a Punta Suelza.