CRÓNICAS MONTAÑERAS: Maladeta Oriental 3308 m.

Domingo 27 de Mayo:

Maladeta Oriental 3308 m.

Con esquís desde el Hospital de Benasque.

Con Javi (el vasco), Luis (el creativo) y Rafa (el freerider).

Segundo día del finde sin mejorar expectativas meteorológicas, de hecho amanece con cielos cubiertos y amenazantes. Sin fijar objetivos ponemos rumbo al fondo del valle mirando al cielo, aparcamos en el Hospital de Benasque y decidimos donde empezar.
Lo ideal y con la nieve más cercana es subir por los tubos de Paderna como hicimos ayer para coronar el pico de Alba. Preferimos variar el itinerario así que portearemos por la carretera cerrada al tráfico dirección a la Besurta.

Calzamos esquís bajo la Renclusa

La carretera a la Besurta sigue cerrada este fin de semana por un único nevero en el desvío al Hospital. El domingo pudimos comprobar que además se encuentra inundada en tres puntos por la gran crecida del ibón "ciego" de Plan d'Están, habitualmente se forma para estas fechas alimentado por el deshielo y las lluvias.
Según anuncia la Web de los Llanos del Hospital el nevero acaba de ser retirado y la carretera abierta, aunque dudo mucho que el siguiente fin de semana se pueda pasar de la recta que da a Plan d'Están.

En el refugio queda poca nieve

Para completar la información sobre accesos, la pista de Vallibierna se puede transitar hasta el refugio de pescadores.
La carretera al Neouvielle, permanece abierta según la web de trafico francés hasta Aubert y Cap de Long, con algunas restricciones durante un mes por trafico de camiones que trabajan sacando madera.
El acceso al refugio de Llauset por la carretera que nace en el pueblo de Aneto esta limpia de nieve, se llega en coche hasta la boca del túnel pero esta cerrado al trafico y se cruza andando. No hay nieve continua hasta el ibón de Botornás, justo debajo del refugio.

Asoman piedras pero se puede esquiar por cualquier lado

Antes de llegar a Plan d'Están, nos metemos campo través por una faja que ataja enlazando con la ruta de invierno a la Renclusa, por ella hace dos años esquiamos estupendamente descendiendo de la Maladeta Oriental. La idea es alcanzar la nieve continua lo antes posible pero.........., "mi gozo en un pozo".
No hay ni rastro de nieve, solo algún nevero "puteante", vemos desde lo alto el inmenso ibón que se forma en Plan d'Están, el puente de tubos se ve inundado y el agua llega hasta la pared cubriendo la carretera, de vuelta la pensamos bajar por la Besurta, igual es más práctico regresar siguiendo la GR.

Salvaguardia

El camino de invierno impracticable para esquiar y nada recomendable para andar, lo mejor ir a la Besurta. Lo vemos tal mal que en vez seguirlo nos desviamos llaneando por la Basa del Onso, apareciendo a mitad trayecto entre la Besurta y la Renclusa, allí podemos poner esquís.
Descalzamos un instante para pasar por delante del refugio y ya hasta arriba, la nieve es abundante, el barranco empieza a abrirse ligeramente pero se puede esquiar por cualquier lado.

Paderna y Salvaguardia

El tiempo parece que aguanta, entre las nubes se filtra el sol, a veces hace un calor insoportable, sudamos como "bellacos", voy a terminar deshidratado. Siempre me sobra agua en la botella y hoy se acabará antes de llegar a la parte alta del glaciar.
Avanzamos lentos, no vamos sobrados de hora, decidimos inicialmente subir al pico Cordier pero abundantes coladas están cayendo en su trayectoria con lo cual cambiamos de objetivo a la Maladeta Oriental.

Nieve de colores

La nieve torna a blanca sobre 2700, profunda e inconsistente. Las tormentas diarias en cotas altas son nieve o granizo aumentando los espesores, al contrario en cotas bajas donde siempre llueve y disminuyen.
A tres mil metros nos cruzamos con varios surferos que no se les ocurre otra cosa que colocarse sobre nuestra vertical y bajar, provocan varias coladas que cortan nuestra trayectoria. Una de ellas vino directa a Rafa y a mi, cambiamos de dirección y escapamos por los pelos. Al menos quedaron quietos donde estaban hasta que pasamos de largo.

Poco a poco el color pasa a blanco

Llegamos sin más contratiempos a la base de la Canal de la Rimaya, tiene buen aspecto y abundante huella, ponemos crampones y tiramos para arriba. Al igual que ayer a mitad jornada sale tímidamente el sol quedando las cumbres despejadas, momento que aprovechamos para "atacar".
Javi esta cansado y decide reponer fuerzas esperando abajo, Rafa, Luis y yo coronamos, desde la cúspide vemos como la niebla sube por el fondo del valle.

A la altura del Portillón Superior

Regresamos a los esquís lo antes posible, la nieve esta suelta y hay que descender la canal cara a la pendiente por si acaso. Da la tentación de bajar de frente, pero un resbalón nos haría coger mucha velocidad siendo imposible detenerse.
Enseguida llegamos a Javi, calzamos esquís e iniciamos la esquiada, a poco de empezar la niebla sube y nos vuelve "ciegos" por completo.

Javi

GPS en mano para no desviarnos mucho y siguiendo huellas vemos el relieve sin sorpresas. La nieve roja vino bien, el color sepia permite apreciar el relieve y disfrutar de la esquiada. En un visto y no visto llegamos a la Renclusa, proseguimos deslizando hasta el cruce con el sendero de Aigualluts.
Queda un buen porteo hasta el Hospital de Benasque, a la Besurta llegamos en 20 minutos faltando toda la carretera.

Blanco inmaculado

A paso ligero bajamos a Plan d'Están, dudamos entre ir por la carretera o por el sendero GR de la orilla opuesta. Apostamos por la carretera y que sea lo que dios quiera.
El puente de tubos esta cubierto por un palmo de agua, con las botas de esquí logramos cruzar sin mojarnos, otros dos tramos están sumergidos, uno es necesario trepar por un lado y bajar por otro, el último se puede rodear.

Vista de la canal en el centro

A media hora del coche descarga una tromba de agua y granizo con rayos, truenos y centellas de "acojonar". Calados hasta los calzoncillos, llegamos al Hospital chorreando, nos metemos bajo una especie de pérgola con tejadillo de madera junto a los aparcamientos, traemos las bolsas del coche pudiendo cambiarnos y recoger los trastos a cubierto.
También aprovechamos para tomar las cervezas y las patatas fritas, no apetecían nada pero la deshidratación y el hambre fueron más fuertes.

Nos metimos en el coche con la calefacción a tope y regresamos a Campo destemplados, !!!quien diría que estamos a pocos días del verano¡¡¡
Quedamos en Campo Rafa y yo, con tranquilidad nos duchamos y comimos antes de recoger y viajar a Zaragoza llegando a casa a las "tantas" de la madrugada.