miércoles, 18 de enero de 2017

Peña Robla 1804 m. y Mandilar 2211 m.

Domingo 15 de Enero:
Peña Robla 1804 m. y Mandilar 2211 m.
Con esquis desde Panticosa.

  Con David (fastman), Rafa (el freerider) y Yaiza (la pro).

  Desgraciadamente me "obligan" a "trabajar" un sábado cada tres y este finde me ha tocado, no tengo más remedio que hacer salida única el domingo en el día. Lo que más me "jode" es que esté nevando en el Pirineo y tenga que quedarme en Zaragoza, menos mal que el domingo cayó la "gorda" y pude desquitarme.

El parking sin limpiar para nosotros solos

  A las 7 de la mañana viajamos rumbo a Panticosa Yaiza, Rafa y yo. Hemos quedado en la base de la estación con David que tiene un apartamento en la urbanización Argualas.
  En Sabiñánigo comienza a nevar ligeramente y en Biescas ya cuaja en los campos, poco más arriba la carretera empieza a blanquear.

Comenzamos el foqueo por la pista del Bosque

  La temperatura es ideal para nevar, entre 1º y -1º prácticamente sin nada de viento, nosotros esperábamos una ventisca inhumana que no permitiera otra actividad que la de tomar unos "huevos fritos por su sitio" en un bar de la zona.
  Llegando a Panticosa la carretera está "chunga", menos mal que hay poco tráfico. Vamos con el Pathfinder que se desenvuelve como "Pedro por su casa", ya tenía yo ganas de conducir por nieve.

El paisaje recién nevado es idílico

  Aún con 4X4 hubo que extremar precauciones a tope, sobre todo por el tipo de nieve, al no estar helando la nieve que cae sobre la carretera se transforma en una especie de pasta deslizante similar a la grasa donde las ruedas van para donde les da la gana.
  Cuando las temperaturas son bajo cero la nieve es seca, se compacta y los neumáticos agarran infinitamente mejor.

Yaiza siempre tiene las manos congeladas

  Para que David no tenga que sacar el coche del garaje, vamos a la puerta de su casa a buscarle antes de tomar en correspondiente café mientras diseñamos el plan de "ataque".
  Estacionamos en el parking más bajo de la estación, no lo han limpiado, es solo para nosotros. Aquí nace la pista de servicio con lo que saldremos con los esquís puestos del coche.

Trazando zetas por las faldas de Peña Robla

  Nieva constantemente y hay poca visibilidad, la temperatura a cero grados sin viento es agradable para andar. Foqueamos por la pista del bosque que zigzaguea bajo el antiguo telesilla cruzando un par de veces la pista nueva.
  La abandonamos en una curva sobre el bosque del Yanel trazando huella por las faldas de Peña Robla hasta su redondeada cumbre.

Cumbre de Peña Robla, no se ve "ni torta"

  No vemos nada, sopla una ligera brisa y la temperatura es mucho más baja, sin perder tiempo continuamos la marcha al Mandilar.
  Descendemos sin quitar pieles a la base del telesquí Fobas II, a partir de ahora siempre por pistas. Ya casi junto al ibón de los Asnos tomamos a la derecha la pista azul a la cumbre del Mandilar.

Esquiando por la Pista Negra Valle de Tena

  Seguimos sin ver nada, sopla un flojo y gélido viento que nos deja insensibles las manos mientras quitamos pieles y preparamos los esquís. Nos "tiramos" por la pista negra Valle de Tena, nieve blanda y profunda algo patatal fácil de esquiar.
  Enlazamos con la azul Cuartalé, roja del Mandilar, Fobas I, Selva Verde y Estrimal llegando al mismo coche con los esquis puestos.

Al coche sin quitar esquís

  Estamos contentos pues hemos aprovechado el día muy por encima de nuestras expectativas, con desnivel y buena esquiada mientras "sentíamos" nevar.
  Ponemos ropa seca y vamos al apartamento de David, nos espera su mujer Elena con su sobrinito de cinco años y la chimenea funcionando. Tomamos unos cafés bien calientes acompañados por dobladillos de Panticosa con una amena tertulia.

Mapa de la ruta

  El viaje de regreso tuvo su "emoción", en todo el día no dejó de nevar, la carretera blanca hasta Biescas, gracias a que había poco tráfico bajamos despacio pero  sin incidentes.
  En el Monrepós no llegó a caer ni un solo copo con lo cual el resto del camino a Zaragoza transcurrió con normalidad.

Vista tridimensional del itinerario

Crónica de David (fastman) en su blog, "Rutas por el Pirineo":
http://buscandobucardos.blogspot.com.es/2017/01/pena-robla-1804-m-y-pico-mandilar-2211-m.html

Reseña de la ascensión:
http://buscandobucardos.blogspot.com.es/2014/02/pena-robla-1804-m-y-pico-mandilar-2211-m.html

Track para GPS y ver la ruta en Google Earth:
https://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=16137914

Otro recorrido similar ascendiendo a Peña Robla por el bosque:
http://danielmurmarin.blogspot.com.es/2016/03/pena-robla-1804-m-y-mandilar-2211-m.html

Ascensión idéntica utilizando la pista de servicio para llegar a Peña Robla:
http://danielmurmarin.blogspot.com.es/2013/02/pico-mandilar-2211-m-y-pena-robla-1804-m.html

Todas las fotos:
https://goo.gl/photos/SFWZ6faqvTmtXZ5z5

lunes, 16 de enero de 2017

Cibolles 2749 m.

Domingo 8 de Enero:
Pico Cibolles 2749 m.
Desde el Molino en Cerler con esquís.

  Con Yaiza (la pro) y Anayet (la esquiadora).

Mapa

  Es nuestro último día del puente de Reyes, planificamos una ruta con desnivel pero de ejecución rápida, hay que llegar pronto al apartamento para recoger y viajar de vuelta a Zaragoza. No tenemos prácticamente nada para elegir, iremos a Cerler subiendo en vez del clásico Gallinero al "olvidado" Cibollés.

Pista azul al collado del Ampriu

  Solo lo he coronado una vez y en verano, ya va siendo hora de subirlo con esquís. Nos desplazamos Anayet, Yaiza y yo al pueblo de Cerler estacionando en el parking del Molino, cota más baja de la estación de esquí.
  Partimos foqueando desde allí por las pistas gracias a los cañones de nieve artificial, los laterales son un prado de vacas.


   Es una jornada fría y soleada, sopla algo de viento que acelera conforme ganamos altura, poca gente esquiando por pistas. 
  Pasamos por la cota dosmil, collado del Ampriu y pista azul camino común al pico Gallinero. Situados bajo la base superior del telesilla en la cota 2560, realizaremos un flanqueo a media ladera para ganar el collado entre el Cibollés y Gallinero.

Pico Pasalovino

  Hace frío, la nieve esta muy dura, la pala de acceso al collado se observa reluciente, presumiblemente helada, para evitar contratiempos ponemos crampones antes de abordarla.
  En el collado sopla el viento con una fuerza horrorosa, sumado a que llevamos los esquis en la mochila nos zarandea con riesgo de tirarnos, veo a Yaiza seguirme y no entiendo como se mantiene en pie.

Cordal del Cibollés con el Gallinero atrás

  Me recordó a los vientos del Moncayo llegando a la cumbre. Enfilamos la cresta del Cibollés con la esperanza de que al alejarnos del collado amaine, en caso contrario será imposible recorrer la arista con seguridad.
  Remontamos luchando como podemos, efectivamente afloja ligeramente de intensidad, nos parapetamos tras un gran bloque para reagruparnos y decidir qué hacer.

Casi todo el cordal es bastante amplio

  Aparentemente estamos a "cuatro" pasos de la cima, Anayet que lleva los esquís más largos en su mochila los abandona momentáneamente. Seguimos progresando, cuanto más cerca del lejano vértice menos sopla el viento, alcanzamos la cúspide sin problemas.
  Nos ha gustado mucho el recorrido por el cordal, es espectacular, con buenas vistas a ambas vertientes y sin apenas dificultad.

Cima Cibollés

  En condiciones favorables se puede bajar esquiando casi desde la cumbre por unas empinadas palas que enlazan con la pista negra de la Canal Amplia al Ampriu.
  Hoy regresamos por el mismo itinerario, no queremos perder altura puesto que hemos partido del mismo pueblo de Cerler y tendríamos que remontar al collado del Ampriu.

Autorretrato

  He pensado un recorrido muy interesante para realizar más adelante, saliendo del Ampriu subimos por la pista roja al pico Gallinero, descendemos esquiando por su lomo sur al collado con el pico Urmella y lo coronaremos. Nuevo descenso al nacimiento del río Isábena para remontar al collado del Cibolles, hollamos el Cibolles por la cresta y esquiada "atómica" desde la cima a la pista negra de la Canal Amplia y Ampriu.


  Incluso se le puede añadir el pico Cerler y el Cogulla coronando cinco cumbres de una tajada. La parte superior de la esquiada fue a la sombra y con viento helador, a pesar de estar abierta la silla del Gallinero no la tomaban más que "cuatro" gatos desorientados.
  Una vez en la cota "dosmil" la sensación térmica mejora sustancialmente, comenzamos a disfrutar de verdad lo poco que nos resta para llegar a Cerler y el coche.


  Lo que se anticipaba como una excursión de trámite a resultado ser mucho más alpina y entretenida de lo imaginado, de hecho nos ha gustado más que la ascensión al tradicional Gallinero.
  Vuelta a Campo a ducharnos, comer, recoger el apartamento y viaje a Zaragoza con deseos de quedarnos en Benasque sin fecha de vuelta.


Track para GPS y ver la ruta en Google Earth:
https://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=16132586

Tramo más estrecho y aéreo

Ruta circular al pico Cibollés en verano:
http://danielmurmarin.blogspot.com.es/2013/07/cibolles-basibe.html


Todas las fotos:
https://goo.gl/photos/FcDko79ac5Ljrsbu9

 Al fondo vemos el vértice

 Vuelta al collado

Vista en relieve del recorrido

Vídeo de la ascensión filmado y editado por Anayet: 


sábado, 14 de enero de 2017

Torre Cordier 3046 m.

Sábado 7 de Enero:
Torre Cordier 3046 m.
Con esquís desde el Vado del Hospital.

  Con Yaiza (la pro) y Anayet (la esquiadora).

El camino de invierno es un patatal infumable

  Segundo día del puente de Reyes en Benasque, ayer esquiamos por la Sierra Negra con sol y agradables temperaturas, el anticiclón continúa con previsión de vientos en aumento.
  Dudamos dónde ir, no queda otra que adentrarse en el glaciar de las Maladetas suponiendo que no hay porteo y la esperanza de encontrar nieve medianamente esquiable.
  Por la orientación norte no entra la luz en toda la jornada siendo una auténtico congelador a la sombra, planeamos coronar la Torre Cordier situada en el centro del glaciar bajo las Maladetas Occidentales.

Refugio de la Renclusa

  Viajamos desde Campo al fondo del valle, aparcamos en el Vado del Hospital a la sombra con viento helador. Parapetados en el costado del coche nos equipamos para adentramos en el "Polo Norte".
  La pobre Yaiza está más "arguellada" que en el verano y se queda "tiesa" nada más salir del coche, para no pasar frío en invierno lo mejor es engordar un par de kilos que hagan función de abrigo natural y sobre todo alimentarse bien el día anterior.

Primeras palas

  Andamos por la carretera unos diez minutos hasta el comienzo de las pistas de fondo del Hospital, se ven justitas de nieve, los tres milímetros que cubren el asfalto se encuentran perfectamente distribuidos.
  Da la impresión que por la noche contraten un grupo de albañiles que con llana en mano van cogiendo nieve del saco y la extienden como si estuvieran enluciendo una pared con yeso.

Abajo vemos la Renclusa

  Foqueamos ligeros para entrar en calor, al llegar a Plan de Están vemos el tramo de carretera que sube a la Besurta sin nada de nieve, las pistas de fondo finalizan allí. El camino de invierno aparentemente tiene nieve pero dura como el demonio y sembrada de huellas de andarines, ni rastro de señales de esquí.
  Decidimos subir por allí y a la vuelta ya veremos, en cuánto llegamos a la primera cuesta pasamos de complicarnos la vida, ponemos crampones y porteamos esquís.

El Ibón de la Renclusa helado

  Hicimos bien porque enseguida la nieve escasea apareciendo tremendas cascadas de hielo cristalino y mogollón de piedras. Nos costó más de lo debido llegar a la Renclusa, aún yendo con los pinchos había que tener cuidado.
  Desde el refugio el panorama es desalentador, a parte de que no hay nadie con esquís, seguimos sobre nieve muy dura.

Nieve dura y bacheada

  Probamos poner esquís con cuchillas y sobre la marcha tomaremos decisiones, fue pasar el poste meteorológico y llegar a un callejón sin salida bloqueados por un patatal de huellas duras y rampas heladas.
  Retrocedemos unos metros y por una huella vieja logramos llegar al Ibón de la Renclusa muy cerca del barranco del Alba.

Pensando en el descenso

  Rectificamos en busca del barranco de la Maladeta, progresamos por su orilla orográfica izquierda sobre unos lomos con nieve granulada, blanda y bacheada alternada con placas lisas por las que trabajamos con cantos y cuchillas como posesos.
  Permanecemos sin "catar" ni un segundo de sol con brisa "marinera" en aumento conforme ascendemos, pies y manos son los primeros en sufrir las consecuencias, a parte de la botella del agua en la que flotan los icebergs.

Las caras sur no conservan nada de nieve hasta las cimas

  Con el objetivo cercano reconocemos que vamos justo de horarios, si nos empeñamos en coronar vamos a llevar un retraso de una hora con el tiempo máximo prefijado para dar la vuelta. Pero la cima está a tiro de piedra, si le digo a Yaiza que nos damos la vuelta estoy seguro que le da un "ataque", ya sería la segunda vez que se retira sin llegar.

Pico Paderna en primer plano y Mall Pintrat atrás

  Reúno a las chicas y les dejo entrever la situación para que sean ellas las que tomen la decisión, mi plan sale "mal", siguen animadas y ninguna se plantea dar media vuelta, cruzo los dedos y pongo las pilas dirección a la cumbre.
  Lo que me preocupa es el descenso con esquís por semejante "berenjenal", se dan las condiciones para que el riesgo de una lesión sea "palpable", siempre queda la posibilidad de bajar con crampones aunque se nos haga de  noche, cada uno lleva su linterna frontal.

A base de cuchillas

  Dejamos los esquís bajo cima de la que nos separa una estrecha cresta. La Torre Cordier es una amplia meseta similar a un campo de fútbol rodeada de paredes verticales que por algún costado tienen más de 200 metros. Se accede a ella por la parte de atrás cruzando un estrecho filo que la une con las faldas del pico Cordier.


  Vemos huella que se dirige a la cresta así que no tendremos problemas. Me coloco en cabeza siguiendo la huella y al llegar al filo, ¡sorpresa!, la huella se acaba, los últimos que subieron dieron la vuelta allí.
  Como no hay otra "posibilidad" me encaro con la cresta dando cramponazos para marcar buena huella y que las chicas pasen con seguridad.


  Enseguida hollamos la enorme plataforma cimera de la Torre Cordier. Felices y contentos aunque también fríos como témpanos tomamos las fotos que inmortalizan la ascensión retirándonos con agilidad.
   Calzamos esquís y que sea lo que dios quiera, me lanzo y .................., pues no está tan mal la nieve. Igual es verdad aquello de que no hay buenas y malas nieves, sino buenos y malos esquiadores, y claro, nosotros somos muy "buenos" y modestos.

Contrafuerte de la Torre Cordier

  Esquiamos íntegramente siguiendo la vaguada sobre el barranco de la Maladeta, es la única zona donde la nieve se conserva lisa y muy compactada pero los cantos afilados agarran a la perfección. 
  El descenso es rápido y divertido, siempre con mucho tiento y controlando los movimientos. En la cota 2330 nos topamos con un resalte helado abandonando la hondonada del barranco.

Cima Torre Cordier al atardecer

  Enfilamos al Ibón de la Renclusa para evitar las palas heladas en la parte central, con un poco de impulso nos plantamos en la puerta del Refugio. Teníamos pensado bajar lo que resta a la Besurta con crampones pero visto lo visto como somos tan "buenos" seguimos esquiando por el patatal.
  Básicamente derrapando por la huella y buscando la poca nieve sin pisar que queda entre los bojes llegamos esquiando al cruce de Aigualluts.

No lo parece pero el frío era horroroso

  A partir de aquí la continuidad de la nieve finaliza, colgamos esquis y andando tranquilamente damos con la Besurta donde no hay nieve. Lo más "peligroso" fue la rampa de bajada a las pistas de fondo, una fina capa de hielo cristalino e inevitable tapiza el asfalto, tuvimos que extremar precauciones. 


  Una vez en Plan de Están calzamos esquís hasta los Llanos llegando al anochecer, Yaiza sacó su frontal para dar "fe" de que ibamos un "poco" justos. Andamos por la carretera otros diez minutos al Vado y el coche, fue echar rápidamente todo al maletero y encender la calefacción para templarse cuanto antes.

  
  
  En el apartamento, con buena calefacción, una vez duchados y cenados se respiraba ambiente de satisfacción y más sabiendo que queda un día de fiesta para disfrutar.
  Mañana volvemos a Zaragoza y no podemos terminar a las "tantasmil", sin complicarnos la vida foquearemos por pistas desde el Molino de Cerler para coronar al final la cúspide del Pico Cibollés, lo que pensamos que sería un "paseo" nos reservó otra "aventura" en la parte final.


Web de la Torre Cordier:
http://torrecordier.info/

Plataforma cimera

Track para GPS y ver la ruta en Google Earth:
https://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=16096351


Otra de nuestras ascensiones tras una gran nevada:
http://danielmurmarin.blogspot.com.es/2012/02/torre-cordier-3046-m.html

Volviendo por la cresta

Ascensión desde la Besurta en primavera:
http://danielmurmarin.blogspot.com.es/2016/05/torre-cordier-3046-m.html

Esquiando por la vaguada del barranco

Polémica sobre la Torre Cordier:
http://desnivel.com/alpinismo/nuevo-tresmil-en-el-pirineo

En los Llanos del Hospital

Ver todas las fotos:
https://goo.gl/photos/N8EVPoCwiKCY7R5N6

Vídeo de la ascensión editado por Anayet: