CRÓNICAS MONTAÑERAS: Table de Ponce 2159 m.

miércoles, 19 de noviembre de 2014

Table de Ponce 2159 m.

Viernes 14 de Noviembre:

Viaje a Jaca

Como ya es costumbre y "tradición" desde hace "mogollón" de fines de semana los viernes marchamos al apartamento de Rafa (el freerider) en Jaca. Estoy "abonado", vivo más en su casa que en la mía, a ver si el siguiente finde vamos a Benasque aunque solo sea para variar.
Viajamos solos Rafa y yo, entre el mal tiempo y que en esta época de otoño" las actividades no son muy llamativas, la gente se queda en su casa. De hecho nos hemos pegado "pateando" el monte dos días y no hemos visto un "alma".

En el llano junto a la cabaña de Lapassa

Sábado 15 de Noviembre:

Table de Ponce 2159 m.

Por el Valle de la Berthe desde Accous, Francia.

"Huyendo" de la lluvia y de la nieve en cotas altas, David (fastman) propone una travesía circular por la parte baja del Pirineo Francés entre los valles de Aspe y Ossau, los picos Ronglet y Anchet desde Accous.

En Escurets aparece la nieve

Quedamos a las 8 de la mañana en el bar Ártica, nuestro "cuartel general" en Jaca, con el Subaru de David nos desplazamos los tres a la parte francesa del Somport cruzando el túnel internacional. Unos kilómetros más abajo del desvío a Lescún llegamos a la localidad de Accous, rodeamos el pueblo por una carreterilla siguiendo indicaciones al "Col d'Iseye".

Nevando ligeramente muy cerca del Col d`Iseye

Sin necesidad de mapa ni GPS recorriendo un tramo de pista forestal en buen estado nos detenemos y estacionamos en un punto justo antes de vadear el río.

Vemos el impresionante circo en la cabecera del Valle de la Berthe cerrado por paredones verticales de la Marère y el Ronglet, tapizados con una fina capa de nieve.

El Ronglet, negro muy negro

Iniciamos la marcha cruzando el barranco e inmediatamente abandonamos la pista por un sendero señalizado a nuestra izquierda. Las ascensión en general es "potente", el sendero bien marcado pero sube "a saco" y esa va a ser la tónica de la jornada, salvaremos 1400 metros de desnivel en apenas trece kilómetros entre ida y vuelta.

Llegando a la cumbre con el Pic de la Marère y Bergon atrás

Remontamos un hayedo que todavía conserva los llamativos colores otoñales, paralelos al torrente d`Araille. Poco a poco giramos al sur saliendo a un llano confluyendo con el barranco de Lapassa, lo cruzamos muy cerca de la cabaña de Lapassa que dejamos a nuestra derecha, divisamos el Col de Ronglet por donde deberíamos bajar.

Nos dirigimos al fondo del valle aumentando la pendiente conforme nos aproximamos al collado, en la cota 1660 un llaneo a la izquierda finaliza en la cabaña de Escurets bajo el evidente "Col d'Iseye".

Cimaaaaaa, con el Mardas y Montagnon d`Iseye

La nieve ya ha hecho acto de presencia, el suelo esta blanco y además nieva ligeramente acompañados de fuerte viento, enseguida nos situamos sobre el collado. Estamos en la divisoria entre los valle de Ossau y Aspe, asimismo en el limite entre el buen y el mal tiempo. Al sur se encuentran nuestras cumbres sumidas en nubarrones y forradas con hielo, en el norte luce el sol que ha derretido la nieve.

Autorretrato, ¡que frío!

No apetece "sufrir gratis", enseguida nos decantamos por una cumbre solitaria y de fácil acceso que presumiblemente tendrá buenas vistas. No sabemos como se llama pero ya nos enteraremos, flanqueamos por sendas de ganado bajo las paredes de la Marère hasta ganar el col de Cotcharas. Por un amplio lomo que se empina y estrecha al final alcanzamos la bonita cima de la Table de Ponce, dos dedos de nieve dan el toque invernal.

Iniciamos el descenso

A nuestra espalda vemos el cercano Mardas y el puntiagudo Montagnon de Iseye, ya incluido en nuestra lista de futuras ascensiones. Arriba "pega" un viento gélido que te "cagas", permanecemos el tiempo justo para las fotos de "rigor" "huyendo" a paso ligero por el mismo camino.

Conforme perdemos altura se agradece el ascenso térmico, menos mal que no nos dio por mantener el plan inicial.

La cabecera del Bitet, mitad blanco, mitad verde

La nieve helada da paso a un barrillo resbaladizo, Rafa acaba con el culo en el suelo bastante "pringado" en el sentido literal de la palabra. Como hay trazos de senda para "dar y vender" probamos con otro más alto evitando perder altura, atinamos perfectamente en el Col de Iseye.

El resto del camino sin novedad, llegamos al coche sin mojarnos en ningún momento siendo que en la parte española no ha parado de llover en todo el día.

De vuelta al Col de Iseye, el tiempo mejora

No nos privamos del picnis reglamentario con latas frías y patatas fritas, aunque un buen caldo caliente tampoco hubiera sentado mal.

Regresamos a Jaca, nos despedimos de David hasta mañana, quedaremos para subir al pico Oturia, un plan "B" que se puede realizar incluso en días lluviosos.