CRÓNICAS MONTAÑERAS: Torre Ventosa 788 m.

lunes, 26 de noviembre de 2018

Torre Ventosa 788 m.

Sábado 17 de Noviembre:

Bicicleta de Montaña

Puig Esteban 649 m. y Torre Ventosa 788 m.

Ruta circular desde Farlete.

Me desplazo en coche a Farlete desde donde comienzo una ruta por los Monegros en bicicleta. El plan inicial consiste en coronar y enlazar las máximas elevaciones con un itinerario circular, Puig Esteban, Torre Ventosa, San Caprasio y Monte Oscuro.
La meteorología anda "entre Pinto y Valdemoro", he consultado las webs disponibles y todas "prometen" nubes y claros pero ni una gota de precipitación.

Barranco del Bujal

Calculo que me sobra tiempo y ni me molesto en madrugar, inicio el pedaleo a las doce y media en Farlete. Por carretera ruedo los primeros 13 kilómetros, paso por Monegrillo y cuatro kilómetros más adelante me desvío a la izquierda por la pista de Espartera.
Llego a otra pista asfaltada por la que transito kilómetro y medio dirección NO antes de desviarme a la izquierda por la Cañada de Miramón.

Puig Esteban

En otro cruce a la izquierda abandono momentáneamente la cañada para ascender por fuertes rampas a la cima del Puig Esteban. Caseta de vigilancia contra incendios en la cumbre y buenas vistas sobre el típico paisaje Monegrino, mientras tomo unas fotos empieza a gotear.
Vuelvo a la cañada con un breve y fugaz descenso, nueva remontada con el horizonte muy nuboso y oscuro.

Vistas desde Puig Esteban

Otra bifurcación a la izquierda paralelos al barranco del Bujal, pequeño mirador con breve parada a fotografiar las erosionadas laderas.
Enlazo con la pista del Guaral, en la cota 750 subo por el ramal de la derecha para alcanzar la Torre Ventosa con su vértice sobre-elevado con una columna de cemento.

Aquí tengo las primeras dudas, sigue lloviendo ligeramente, San Caprasio está muy alejado y sobre la cumbre se ven cortinas de agua nada motivadoras.
Llevo poco desnivel y kilómetros así que me arriesgaré, tengo una escapatoria poco antes de San Caprasio si llueve mucho.

Queda una larga travesía por el cordal de la sierra a caballo entre Huesca y Zaragoza con frecuentes subes y bajas, sobretodo con muy buenas vistas a las dos vertientes.
Transcurrido la mitad del flanqueo por la sierra cruzo una zona arcillosa, el barro se empieza a acumular en las ruedas y engranajes.

Barranco del Bujal

La cadena salta, las ruedas rozan y poco a poco un bolo de arcilla mezclado con piedras y ramas bloquea el giro obligando a detenerme. Me he metido en "arenas movedizas", aquello es un lodazal de la "muerte". Desatoro la rueda con un palo gordo e intento pedalear en bajada, es imposible, en un par de vueltas de rueda el barro me frena.

Torre Ventosa

Me echo la bici al hombro e intento avanzar andando dando resbalones, el barro pesa más que la bici. Lo limpio lo más posible cargándola de nuevo, la llevo encima hasta en cuesta abajo y durante un buen trecho.
Me cuesta avanzar un "huevo", temo no llegar con luz al coche, por un momento me desmoralizo y pienso en abandonar la bici y regresar andando al pueblo.

Buenas vistas desde el cordal de la sierra

Alcanzo la escapatoria, es la ruta norma de ascenso a San Caprasio desde Farlete por el barranco de la Torraza, antiguo camino a Lanaja.
Aprovechando la pendiente monto y me lanzo pedaleando con fuerza para evitar un nuevo bloqueo de ruedas. Tengo mucha suerte, el terreno cambia de composición, apenas se pega el barro en los neumáticos.

Me aproximo a Farlete a toda velocidad, entro en el pueblo con la bici hecha un "asco", busco una fuente para limpiarla, así no la puedo meter en el coche. Encuentro una y me pongo a mojarla de malas maneras, el barro emboza la fuente y empieza a rebosar poniendo la calle perdida.
Un vecino de la casa de enfrente me ve y sale a ofrecerme una manguera a presión que acepto con agradecimiento, en poco rato dejo la bici "niquelada".

Aprovecho las circunstancias para darme un manguerazo a mi mismo, la señora de la casa me ofrece ropa seca para cambiarme y evitar una pulmonía, lo agradezco pero tengo ropa en el coche para ponerme seco de arriba a abajo.
La gente de los pueblos y sobre todo la gente mayor es super amable, no es la primera vez que nos "acogen". En el viaje de este verano a los "techos provinciales" nos regalaron huevos y melocotones solo con dar las buenas tardes.