CRÓNICAS MONTAÑERAS: Neouvielle 3091 m.

jueves, 29 de octubre de 2015

Neouvielle 3091 m.

Domingo 20 de Septiembre:

Neouvielle 3091 m.

Desde el Lac d'Aubert

Les Laquettes

Tras coronar ayer los picos Maou y Badet en la Reserva Natural del Neouvielle, pasamos una segunda noche en el aparcamiento de Cap de Long a 2200 metros de altitud. Estamos Bea (secretaria), Sara (saracrof), Paula y yo, dormimos entre mi coche y la furgo de Sara, vuelve a ser una noche fría.

Albert, Aumar y Laquettes

Bea tiene un saco "fino" y a base de mantas por encima logra pasar una noche en condiciones, la anterior cogió frío y se nos puso mala.

Amanecemos antes de que llegue el sol, el día está despejado y sopla viento, tenemos previsto coronar el Pico Neouvielle desde el Lac de Aubert. Sin desayunar nos metemos en el coche con la calefacción a tope desplazándonos al parking de Aubert donde no se puede pernoctar al estar dentro del Parque Nacional.

Entrada al glaciar del Neouvielle

Allí estamos resguardados y el sol ya calienta, montamos el "chiringuito" con la mesa, sillas y hornillos para desayunar. Abrigados se está de vicio, hacemos tostadas y café con leche caliente, al igual que ayer tenemos de todo.

Hablando y comiendo vemos como pasa la gente, la ascensión al Neouvielle es "corta" y no tenemos prisa.

La cumbre y lo poco que queda de glaciar

Comenzamos la marcha en manga corta, cruzamos la presa del Lac de Auber por encima y en el otro extremo nace el sendero. Es una ruta muy frecuentada y hoy se puede demostrar, montañeros y senderistas a punta de pala por todos lados.

Al poco de empezar, en la cota 2220 dejamos a la izquierda los hitos que van al Pas du Gat, comunicación con la vertiente de Cap de Long.

Hielo puro con una fina capa de nieve recién caída

A la derecha empezamos un fuerte ascenso por una empinada canal, aparecen a nuestras espaldas nuevos ibones, los Laquettes, Aumar....

En la cota 2440 cruzamos la Brecha Barris, es el contrafuerte que baja del Pico Ramougn. Desde este punto entramos en zona de bloques y piedras, con trazos de senda difusos y muchos hitos el avance se ralentiza.

El resto hasta la cumbre rocas tapizadas con nieve y hielo

Enfilamos como "faro" a la evidente Brecha Chausenque para entrar el el glaciar casi extinto del Neouvielle. Buscando el mejor paso entre bloques y siguiendo mojones colocados anárquicamente nos situamos bajo la Brecha, la dejamos a la derecha adentrándonos en el glaciar.

Vemos la cumbre culminando el canchal y gente trepando por los cuatro costados.

Sobre el contrafuerte este con el Midi de Bigorre

La parte central conserva una gran mancha de nieve que en condiciones normales se podría evitar. Las circunstancias actuales son diferentes, esta semana ha nevado en cotas altas cubriendo todo de una fina capa de nieve, a base de rehielos esta nieve se ha transformado en hielo que tapiza las rocas haciendo delicado el avance.

Pequeñas trepadas por el contrafuerte

Sara se mete por la izquierda buscando roca seca, Paula, Bea y Yo ponemos crampones subiendo por en medio del nevero, más que nieve es hielo puro, aún con pinchos hay que pasar con cuidado.

Sara nos espera arriba, nos quitamos los crampones y continuamos haciendo "virguerías" entre el hielo.

Bea posa con el Ramougn

Cada cual se busca la vida por donde puede, hay gente dando vueltas por toda la pala, no entiendo como no ocurre nada, las pintas que tienen algunos no dicen nada a su favor.

No nos gusta el panorama, para evitar las partes altas de esta cara norte flanquearemos dirección este a ganar el contrafuerte que divide los glaciares de Ramougn y Neouvielle.

Conexión de la vira aérea con la canal cimera

En la cresta incide el sol y apenas hay hielo, confluimos con la ruta normal de verano que viene en diagonal entre los bloques helados.

El principio de la canal por la que se sube habitualmente está a la sombra y congelada, la "peña" se las ve y se las desea para subir y bajar.

No hay sitio en la cumbre

Descubrimos una vira al sur señalizada con hitos que enlaza con la parte alta de la canal, las chicas enseguida se lanzan por ahí. El problema es el patio y la exposición bastante considerable, iba despacio y "acongojado" gritandoles, esperarmeeee, esperarmeeee, ¿¿por donde habéis pasadooo??.

Mira que he subido veces y veces a este pico en invierno con esquís y nunca he sentido el "temor" de hoy.

Establecemos el campamento unos metros más abajo

Por fin estamos en la cumbre, pero hay un problema, no tenemos sitio, gente a mogollón con cuerdas mochilas, sentados, de pie, comiendo, empujándose.........., es lo que tiene ir a picos "conocidos", pero esto era demasiado.

Nos instalamos unos metros más abajo para estar tranquilos, comemos mientras contemplamos el paisaje y "rajamos" de la gente que "okupa" la cumbre.

Conseguimos llegar al hito cimero

Mientras tanto me voy a inspeccionar la vertiente norte del cordal, por donde subimos en invierno, para no tener que repetir la aérea vira sur. Pidiendo el paso por favor y soltando algún perdón piso a la gente y la cima, destrepo un poco. Hielo y más hielo es todo lo que veo, descartando definitivamente bajar por allí.

Comienza el destrepe por la canal

Paula consigue alcanzar el hito cimero resistiendo sin que la echen, cuando vuelvo yo llamo a Bea y Sara. Brincando entre la peña que las mira con caras de pocos amigos se juntan con nosotros para tomarnos el selfie cimero que inmortalice esta atípica ascensión.

Volvemos a las mochilas y nos piramos justo cuando el noventa por ciento de los presentes decide lo mismo.

Por el contrafuerte

La gente se mete por la canal helada, Sara tiene muy claro que la vira es lo mejor, las tres chicas van como "cabras" y encima disfrutan, yo como siempre el último y pensando cada paso.

Una vez en el contrafuerte y viendo lo mal que bajan todos, desandamos el mismo itinerario aunque sea a cuenta de dar rodeo.

En un saliente sobre el glaciar del Ramougn

Lo peor es el tramo de acceso al nevero y el propio nevero, nos da pereza sacar crampones para tan poco trozo e iniciamos un resbaladizo destrepe. Como es habitual salimos ilesos, algunos culazos no han faltado.

De aquí para abajo roca seca y bloques, descenso un poco pénible, con lo bien y rápido que se baja con esquís.

Complicado destrepe por hielo agarrada al propio hielo

Aprovechamos para ir tranquilos y tomar fotos, el día es nítido y salen bien.

Bea ha contrastado de ayer vomitando y hecha polvo sin lograr subir al Maou y Badet, a hoy sonriente, feliz y contenta, subiendo y bajando como nunca. Ya le decía Paula; sino no llegas a ir tan bien hoy me hubiera pensado que eras un "paquete".

Lac de Aumar

En el coche nos esperan las latas frescas que compaginamos con una especie de merienda a base de picoteo de sobras y ensalada. Fenomenal y aprovechado fin de semana "hippie" con un acompañamiento de lujo, falta el largo viaje de vuelta a Zaragoza con parada intermedia en Aínsa a tomar un café.