CRÓNICAS MONTAÑERAS: Peña Forca 2390 m.

viernes, 29 de agosto de 2014

Peña Forca 2390 m.

Sábado 19 de Julio:

Peña Forca 2390 m. y accidente de Sofía

Multiaventura Tebarray 2014

Cuarta jornada de la Multiaventura Tebarray.
Inicialmente estaba proyectada una travesía de dos días en la que el primero coronaríamos Peña Forca por Tatxeras y descenderíamos a Selva de Oza. Allí tendriamos un vehículo de apoyo con la cena y material de acampada, en dos viajes por carretera nos desplazaríamos a Guarrinza para ascender esa misma tarde al Ibón de Acherito a pernoctar.
La segunda jornada bajamos a las cabañas de Ansabere en Francia por el Ibón de Ansabere y nueva remontada al collado del Petrechema, cimas de Sobarcal y Acherito para finalizar bajando al refugio de Linza.

Subimos desde Tatxeras raudos y veloces

Los pronósticos para esa noche eran lluvia y frío así que cambio de planes. Haremos dos ascensiones independientes intercalando un barranco el día de en medio. Hoy nuestro objetivo es Peña Forca subiendo por la brecha de Tatxeras y bajando por el collado de Estribiella, lo que iba a pasar no lo podíamos imaginar.......

Principio de la brecha de Tatxeras

Iniciamos la marcha "felices y contentos" con el día un poco gris y algo de viento, temperatura ideal para andar, ataviados con ropa en la mochila previniendo posible lluvia. La "alineación" de monitores es abundante, han coincidido Gabi y Ángel, a parte de Bibi y yo que estamos fijos.

Todo fue muy bien, cruzamos el barranco de Petraficha por un puente de cemento y fuimos atajando una pista ganadera con la circulación restringida para vehículos. Pasadas las últimas naves, en la cota 1520 abandonamos definitivamente la pista por un sendero enfilando al evidente paso de Tatxeras bajo los paredones del Achar de Alano.

Paso de Tatxeras

Penetramos en el valle colgado que recorremos dirección este por zonas herbosas, remontamos suavemente y poco a poco la hierba da paso a las rocas calcáreas. Aproximadamente en la cota 2020 salimos del valle hacia el sur enfrentándonos a pedregosas laderas, los hitos nos guían a ganar el cordal desde donde avistamos la vertiente de Siresa.

Generalmente siempre por la parte alta del lomo, algunos obstáculos se evitan por la vertiente sur hasta llegar a la cumbre.

Herboso valle colgado

El viento llevaba toda la mañana arreciando, en algún momento salieron volando las gorras inesperadamente pero nada preocupante. Cuando estamos a escasos diez minutos de la cumbre, unos metros más abajo del cordal por la vertiente sur, se desvanece el rastro de senda, veo hitos arriba y trazo una diagonal por una empinada pedrera y así confluir de nuevo con el itinerario más cómodo.

La hierba da paso a un pedregal calcáreo

Estoy algo tenso porque hay mucha piedra suelta y me preocupa que alguien tire alguna alcanzando a los de abajo, de repente oigo cantidad de gritos y veo abajo a Sofía en el suelo, me imagino una piedra le ha impactado y desciendo rápidamente esperando que no sea nada importante.

Ángel, que es monitor de Multiaventura y a su vez el padre de Sofía la esta sujetando en el suelo con cara de desesperación mientras ella grita de dolor, por un instante me temo lo peor.

Avistamos la vertiente de Siresa

Me acerco y veo su rodilla totalmente deformada, se le ha salido la rotula, chilla sin parar victima de un dolor insoportable, tenemos que avisar rápidamente a los Grupos de Rescate. Mientras Gabi intenta contactar yo subo con el grupo al cordal a un sitio estable y seguro, les dejo con Bibi a su cargo y vuelvo hasta Sofía.

La cobertura es muy mala, Gabi llama al 112 y se corta cada dos por tres, no sabemos si se han enterado. Me pongo a intentarlo yo, utilizo una aplicación móvil que se llama Alpify y envía las coordenadas a una central de alarmas que moviliza el rescate.

Segundos después de esta foto se produjo el accidente de Sofía

A la vez consigo hablar directamente con el Grupo de Rescate de Jaca, me llaman de la central de alarmas confirmando que ya han movilizado al helicóptero y que tienen mis coordenadas.

Solo queda esperar arropando y calmando a Sofía en lo posible que sigue retorciéndose de dolor. Como cabe de esperar un fin de semana en agosto los dos helicópteros están efectuando otros rescates y tardan en venir aunque al final le dan preferencia por tratarse de una menor.

El helicóptero se posó y paró motores

Cuando vimos aparecer el helicóptero por el horizonte una sensación de alegría y tranquilidad nos invade sabiendo que en pocos minutos llegará el "final feliz". Se acercan a nosotros con precisión, les hago la señal de V con los brazos pidiendo ayuda y sacan la mano por la ventanilla para confirmarnos con un OK que ya nos han visto.

El viento arrecia y ahora es fuerte y racheado, el helicóptero realiza multitud de maniobras para intentar acercar a los especialistas y al medico pero no hay manera, el viento les zarandea como si de una hoja se tratara. Se posan unos 200 metros más abajo, dejan al medico y a uno de los guardias aligerando peso para realizar otro intento que igualmente resulta infructuoso.

Incluso en llano tuvo problemas para despegar por el viento

Al final no tienen más remedio que posarse abajo y subir andando para evacuarla a pie. Los dos guardias se planta arriba a toda pastilla, deja la mochila y se va a buscar al medico, le coge la mochila y lo "achucha" para que corra.

Los guardias siempre intentando subir los ánimos e inculcando tranquilidad, el medico igualmente muy amable y cariñoso con Sofía le inyecta un calmante y le coloca la rotula en su sitio con una facilidad pasmosa sin hacerle daño.

Comenzamos a bajar con el grupo muertos de frío

Desde ese instante todo cambia, desaparece el dolor de la cara de Sofía, incluso puede apoyar la pierna. Mientras el grupo de rescate con Ángel transportan en brazos a Sofía hasta el helicóptero, Gabi y yo iniciamos el descenso con el grupo, están arriba nerviosos y muertos de frío, es mejor empezar a andar cuanto antes.

No hemos hecho cima pero volveremos con Sofía, bajamos tranquilos y sin problemas, al rato oímos al helicóptero despegar.

Peña Forca queda atrás

Sofía y Ángel son evacuados al hospital de Jaca, tras la revisión medica no parece que haya lesión que requiera cirugía pero si será necesario un largo reposo, la escayolaron y regresaron al Campamento, al día siguiente tendrá que abandonar la actividad y volver a Zaragoza.

Se despidió muy apenada, le preocupaba más el hecho de tener que marchar que su propia lesión, es una pena porque Sofia es de las mejores promesas montañeras que tenemos, en cuanto este bien recuperada volveremos a la montaña con ella.